La demanda de productos de la Plaza de Abastos número 1 de la ciudad ha aumentado en los meses de verano, de igual modo que sucede en otros picos de clientela, como la Navidad. Ante el incremento del número de clientes por la época estival, desde el mercado refuerzan el servicio de venta a través de internet y animan a los compradores a emplear el servicio.
La responsable del envío a domicilio, Noemí Martínez, explica que hacen de “personal shopper” para los clientes en línea, escogiendo los productos entre los puestos de los placeros. “Allí se selecciona lo mejor que se le pueda servir al cliente, ya sea fruta, pescado, carne, charcutería, quesos…”, enumera, para confeccionar los pedidos solicitados por los usuarios de la herramienta web.
Uno de los perfiles del cliente que recurre a esta opción es el de la gente joven: “Posiblemente no puedan visitar el mercado por motivos de trabajo”, valora Martínez. La responsable apunta la comodidad de poder escoger el horario de entrega como un punto positivo del servicio por internet: “Hay que hacerla en la franja que el cliente seleccione”.
Los productos que más destacan en la venta a través de la red son frutas, verduras, quesos, embutidos y carne. Ya en menor medida, el pescado. El reparto a domicilio del mercado, que aglutina 25 comercios, supone una alternativa a los servicios de idéntico carácter que prestan las cadenas de supermercados.
Repunte de afluencia
El gerente de la Plaza de Abastos, Alberto González, afirma que se está notando un “repunte de afluencia” que compensa la marcha de clientes habituales a sus destinos de veraneo. “En esta época del año suele ser un cliente más de turismo”, así como de “familias” que vienen con los parientes “del pueblo”.
En este sentido, la hostelería y el turismo están reemplazando la clientela más fiel. De acuerdo con González, “se ha compensado esa bajada por los clientes foráneos”, a pesar de que “este es un mercado donde se atiende, sobre todo, a clientes de la ciudad; no es turístico, como puede ser una boquería”.
