El calor no da tregua a los ourensanos. Tras los meses de junio y julio, en los que la provincia no superó los 37 grados, hoy comienza la segunda ola de calor desde que arrancó agosto. En este caso, el episodio de altas temperaturas se prolongará, como mínimo, hasta el jueves, y dejará máximas superiores a los 40 grados en diversos puntos de la geografía ourensana.
Meteogalicia, de hecho, activó para hoy el aviso rojo por “forte calor” en la comarca de Valdeorras y el naranja en la cuenca del Miño, mientras el resto de concellos se mantendrán en aviso amarillo por previsión y llegada de altas temperaturas. Se prevé que Arnoia y la ciudad sean los puntos más cálidos, ya que alcanzarán los 41 grados. Vilamartín de Valdeorras, Ribadavia y Leiro, por su parte, podrían llegar a temperaturas muy similares. Otras localidades como Verín no superarán los 38, al igual que O Carballiño, Xinzo o Allariz. Además de las elevadas temperaturas diurnas, cabe destacar que el mercurio se mantendrá en valores superiores a los 20 grados tras la caída del sol (un fenómeno conocido como “noches tropicales”).
Calor extremo
Lejos de desaparecer, las altas temperaturas proseguirán durante los próximos días. En esa línea, Meteogalicia activa de nuevo durante mañana el aviso por calor extremo en la cuenca del Miño y Valdeorras, y el aviso amarillo en el noreste y sureste de la provincia. Los termómetros se mantendrán en valores extremos: Arnoia y Ourense volverán a alcanzar los 41 grados, mientras que Ribadavia, Leiro o Vilamartín rozarán los 40.
Ya en la jornada del jueves, se prevé un descenso generalizado en los mercurios. Las temperaturas podrían caer hasta los 38 y 37 grados en toda la provincia, aunque las mínimas se mantendrán en torno a los 20 grados. Por el momento, Meteogalicia no ha activado avisos por calor extremo para ese día.
El impacto
Las altas temperaturas conllevan un impacto notable en la salud de la población más vulnerable (personas mayores, niños o enfermos crónicos, entre otros). Según los datos del Sistema de Monitorización de la Mortalidad Diaria (MoMo) del Instituto de Salud Carlos III, seis ourensanos han fallecido a causa del calor extremo desde que arrancó el mes de agosto. La primera ola de calor se registró en la primera semana del mes, cuando localidades como la ciudad o Vilamartín de Valdeorras llegaron a superar los 40 grados. La ausencia de episodios de este tipo durante junio y julio se aprecia en los datos recogidos por MoMo: ningún ourensano murió por culpa de las altas temperaturas en esos dos meses. Las cifras de este verano distan mucho de las del año pasado, cuando fallecieron un total de 53 ourensanos a causa del calor.
En el conjunto de Galicia, este 2023 se han registrado un total de 66 óbitos vinculados a las altas temperaturas. La provincia más afectada es Pontevedra, donde han muerto 31 personas a causa del calor. Le siguen A Coruña, con 23, y Lugo y Ourense, ambas con 6.
Con respecto a España, las cifras de muertes se multiplican. Cabe destacar que zonas del interior peninsular o las comunidades bañadas por el Mediterráneo han vivido sucesivas olas de calor en lo que va de verano. Desde el 1 de junio, el sistema MoMo registró 2.087 decesos relacionados con episodios de calor extremo. Solo en agosto, el número asciende a 850.
