Este concello de la Denominación de Origen Ribeiro cuenta con lugares en los que se funde la belleza del entorno con la riqueza patrimonial. Iglesias, puentes, un monasterio y parajes naturales como Pena Corneira, merecen ser visitados
El paisaje de las riberas del Avia se mezcla en Leiro con una amplia extensión de viñedos de la Denominación de Origen Ribeiro, que rodean este núcleo situado a corta distancia de Carballiño y Ribadavia. Su atractivo es singular, destacando dentro de su rico patrimonio histórico-artístico el Mosteiro de San Clodio, si bien cuenta con otros tesoros que no dejan indiferente a quienes los visitan, ya sea en plena naturaleza o por su gran interés monumental.
Igrexa de Santo Tomé de Serantes: Cuenta con un retablo mayor y el único baldaquino gótico de Galicia. Posiblemente sea la iglesia más sorprendente de todas las de este municipio por su riqueza ornamental, que ha sido merecedora del reconocimiento como Bien de Interés Cultural. Su fundación está fechada en el año 1170 y es de estilo románico de gran calidad, con elementos próximos al primer gótico.
Igrexa de San Breixo de Berán: El pueblo de la Entidade Menor de Berán tiene un conjunto histórico con interesante tramado urbano barroco de especial protección patrimonial. La iglesia barroca del siglo XVIII está dedicada a San Verísimo, en la que destaca sobre todo su fachada con estípites y columnas panzudas pareadas a los lados de la moldura de la puerta de entrada. Presenta, entre otros elementos, el escudo de los Sarmiento, los señores del castillo de Ribadavia, en la parte alta de la fachada.
Pena Corneira: Si el visitante prefiere disfrutar de la montaña y al mismo tiempo de un paisaje espectacular, hay en Leiro este paraje declarado en 2007 Monumento Natural, con una superficie aproximada de 977 hectáreas, compuesta por un macizo granítico caracterizado por una compleja asociación de formas geológicas que lo convierten en un espacio singular. Las formas de las rocas atraen especialmente la atención a geólogos y para la práctica de la escalada. Su origen, de hace 300 millones de años, es fruto de una masa de magma de un antiguo volcán que se solidificó.
O Salgueiral: Este paseo fluvial transcurre por las riberas del Avia en el mismo tramo urbano de Leiro, con un puente colgante que une ambas orillas del río. Se trata de un paraje arbolado de gran belleza y en el que se combina la naturaleza, que tiene una zona de baño, con parques infantiles, aseos, circuitos saludables, pista polideportiva, campo de fútbol y una red de senderos señalizados, homologados por la Federación Galega de Montañismo. Se trata de un entorno magnífico para disfrutar de una jornada en familia en plena naturaleza pero sin salir de la localidad de Leiro, por cuyo motivo recibe numerosos visitantes durante todo el año.
Ponte de San Clodio: Declarada Monumento Nacional en 1981, es Bien de Interés Cultural junto con el Mosteiro de San Clodio, que es el monumento más conocido de Leiro. Construida en el siblo XV sufrió una reforma en el XVIII. Según consta en la documentación, contaba con una capilla y todavía conserva un cruceiro con capitel y fuste. En este puente se libraron durísimos enfrentamientos durante la Guerra de la Independencia en 1809.
