El rural facilita la adquisición de casas para atraer población

Oímbra, último concello en impulsar una bolsa de venta de viviendas, logró ocupar en un año siete

El Concello de Oímbra busca asentar población en el rural

Con la pandemia, el asentamiento de población en el rural se convirtió en una de las mejores opciones para muchas familias. Con esta premisa, y ante la lucha contra la despoblación, cada vez son más los concellos de la provincia que impulsan proyectos para tratar de fijar población. Entre ellos, Vilar de Barrio, A Veiga, Ribadavia o Cenlle, quienes apuestan por diferentes modalidades para atraer nuevos vecinos. Uno de los últimos en sumarse al impulso de crear una bolsa de viviendas fue el Concello de Oímbra a través de su programa “Vive Oímbra”.

El proyecto, puesto en marcha en 2021, se enmarca en el Plan estratégico de subvenciones del Concello, donde dan facilidades a los vecinos para animarlos a vivir en Oímbra. “Vive Oímbra” es un portal web que funciona como una “inmobiliaria municipal” -explica Ana Villarino, la alcaldesa-, donde el personal municipal muestra las casas que están en venta o con opción de alquiler. El Concello funciona de intermediario entre los propietarios y los interesados. Este año se destinaron para este programa casi 20.000 euros de fondos propios.

Más allá del portal web, desde el Consistorio ofrecen un seguro de impagos para los dueños de las viviendas. “Cando se trata de alugar, ás veces a xente non se fía, polo que nós ofrecemos este seguro e se no caso de que o que aluga o inmoble non paga, nós facémonos cargo diso durante un ano”, explica la regidora, quien asegura que en este primer año no hizo falta echar mano de esta herramienta.

Desde que se puso en marcha “Vive Oímbra” se han vendido tres casas y una cuarta está en trámites, y se han alquilado tres viviendas. El núcleo con más impacto es San Cibrao mientras que los nuevos vecinos “son algúns naturais do concello e outros vivían en Verín e viñeron para aquí”, cuenta Villarino. “É unha forma de animar á xente a que veña a vivir a Oímbra, e vemos que está funcionando. Agora o que queremos é que haxa máis oferta de casas porque realmente vemos interese despois da pandemia, sobre todo por ser un lugar rural que ten todos os servizos e comunicacións”, concluye.

Desde Vilar de Barrio a Valdeorras

“Se queremos que o rural comece a funcionar, isto ten que ir ligado ao traballo”, cuenta Manuel Conde, alcalde de Vilar de Barrio, donde están muy concienciados en la importancia de atraer gente a su municipio. El Concello trabaja en esta línea siendo intermediario de las compras y alquileres, además de ofrecer asesoramiento de todo. Para hacer más atractivo vivir en Vilar de Barrio, tienen sobre la mesa nueve puestos de trabajo para inmigrantes.

En cuanto a asesoramiento, en Vilariño de Conso captaron decenas de vecinos en el último año, motivados por la ayuda en las gestiones que facilitan desde el Consistorio. En Ribadavia también impulsan la venta de inmuebles del casco viejo con la condición de que se restauren. Y en Cenlle impulsaron un banco de viviendas hace años y adjudicaron este mismo mes seis viviendas modulares.

Son muchos los municipios que apuestan por la modalidad de viviendas sociales, como A Mezquita, Cualedro o Vilardevós. En la comarca de Valdeorras, Rubiá cuenta con seis viviendas sociales y en Larouco con dos, mientras que en A Veiga conceden ayudas a los particulares que desean rehabilitar sus casas para alquilar, en la que participan los dueños de 17 inmuebles.

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