La Audiencia Provincial de Madrid ha ratificado la condena a un año de prisión y a dos de inhabilitación a un odontólogo acusado de lesiones imprudentes por someter a una paciente a una operación que no era necesaria y que le dejó lesiones y secuelas que aún padece.
Según ha informado hoy la asociación el Defensor del Paciente, la sección 29 de la Audiencia Provincial de Madrid ha confirmado recientemente la condena que había impuesto en 2010 el Juzgado de lo Penal número 13 de la capital al citado médico por un delito de lesiones imprudentes, consistente en un año de prisión, dos de inhabilitación y una indemnización de más de 33.500 euros a la paciente por lesiones y secuelas.
En la sentencia, a la que ha tenido acceso Efe, la Audiencia Provincial considera probada 'la existencia de un diagnóstico equivocado', así como 'la innecesariedad de la cirugía periodontal y de las endodoncias realizadas, así como su incorrecta y deficiente realización'.
Por eso concluye que el acusado 'ha conculcado reglas elementales que deben presidir la actuación médica' y destaca que como consecuencia de su actuación 'la querellante ha precisado tratamiento médico odontológico y psicoterápico', lo que indica una 'imprudencia grave profesional'
Los hechos ocurrieron en septiembre de 2006, cuando la querellante, de 35 años, acudió a la consulta de un odontólogo del Centro Médico Infanta Mercedes al sufrir la rotura de una muela, y el médico le diagnosticó una grave enfermedad periodontal por la que necesitaba ser operada urgentemente, con injerto óseo y membrana.
Al ser operada, el odontólogo aseguró a la paciente que debía hacerle cinco endodoncias en ese mismo momento, todo ello por un importe total de 2.690 euros, más de lo inicialmente presupuestado.
La mujer no evolucionó bien y acudió al Servicio de Urgencias Odontológicas de la Seguridad Social, donde le informaron de que no presentaba esa enfermedad, de que el injerto de hueso presupuestado y pagado no había sido colocado y de que las endodoncias habían sido mal ejecutadas y que tres de las piezas debían ser extraídas debido a una perforación.
A consecuencia de estos hechos, la paciente perdió tres piezas dentales, continúa con tratamiento para intentar conservar el resto de las piezas y presenta un cuadro de ansiedad postraumático que ha requerido asistencia psicológica hasta ahora, ha precisado el Defensor del Paciente.
