La Dirección General de Tráfico destaca que más de la mitad de los conductores vive situaciones de riesgo por culpa de no llevar a los animales bien sujetos en los vehículos.
Por lo tanto, para evitar este y otros peligros, aquí va una pequeña lista de consejos que puede ser de utilidad de cara a lo que resta del verano, época del año en la que se acostumbra a realizar largos desplazamientos en carretera.
No pienses solo en tu necesidad de descanso
Por supuesto, en cuanto el conductor se encuentre con sueño o mareado, o simplemente vea limitada por alguna circunstancia su capacidad de concentración, debe estacionar el vehículo y tomarse un respiro. Pero, además, debe tener en cuenta a otros ocupantes y, sobre todo, a aquellos que no pueden hablar.
Un perro, por ejemplo, puede acumular un fuerte estrés al permanecer encerrado en el vehículo, así como precisar algo de agua o realizar sus necesidades en cualquier momento.
Trasporta a tu mascota de forma segura
Si es un perro, las opciones más socorridas son la rejilla divisoria, el trasportín o el arnés.
No des de comer al perro justo antes de salir
La digestión podría provocarle mareos a tu mascota, pasando así un "mal trago" que podría solventarse fácilmente con un poco de prevención, adelantando su ingesta para que se alimente unas horas antes.
Si tienes un reptil, nada de viajes largos
No resulta muy recomendable salir de la provincia con tu tortuga. Y es que los viajes de más de hora y media pueden suponer para un reptil un nivel de estrés extremo, por lo que están desaconsejados.
No molestar al conductor
Por la seguridad de todos los ocupantes del vehículo, lo mejor será colocar la mascota en un lugar que no moleste al conductor, que debe mantener en todo momento del viaje una perfecta libertad de movimientos y un campo de visión completo.