Una central hidroeléctrica aprovecha grandes masas de agua para generar electricidad. Te contamos todo el proceso sobre su funcionamiento y la generación de energía eléctrica
La energía es un asunto clave en el futuro inmediato y a largo plazo. Más, tras en medio de una situación como la de la frontera entre Rusia y Ucrania que ha disparado su precio. Por eso, enclaves como las centrales hidroeléctricas suponen una infraestructura de actualidad. Pero, ¿cuánto se conoce de ellas?
¿Cómo funciona una central hidroeléctrica?
Aunque muchos no entiendan su funcionamiento, todo el mundo ha visto alguna vez una presa. Pero, ¿cómo funcionan realmente?
- Una presa intercepta el curso del agua
- El agua es conducida por túneles hasta las turbinas hidráulicas
- Giran para generar energía mecánica, que después es transformada en energía eléctrica por el generados rotativo
- El agua abandona el circuito y vuelve al cauce
- La electricidad pasa por un transformador para disminuir su intensidad y aumentar su tensión
- Se transmite la electricidad, y pasa por un nuevo transformador para elevar la corriente y bajar el voltaje en el lugar de consumo
Este es el funcionamiento básico de una central hidroeléctrica, pero hay muchas clases.
Clases de centrales hidroeléctricas
Central de pasada
Estas son las más básicas: en ellas, el agua procede directamente del caudal natural del río, que atraviesa las turbinas y vuelve al propio cauce.
Central de embalse
La más habitual: una presa conforma un embalse (natural o artificial) y se conduce el agua por tuberías hasta las turbinas, donde se produce la energía. Finalmente, el agua vuelve a salir de la presa al otro lado de ella.
Central de almacenamiento
Este tipo de centrales, también llamadas de acumulación por bombeo, usan dos embalses. Se sitúan a dos alturas de un río, sirviendo el segundo de reserva de energías.
Así, en momentos de poca demanda energética, el agua que ya ha pasado por las primeras turbinas puede volver a subir el río mediante bombeo.