Las diferencias entre un hongo comestible de uno mortal son, a veces, insignificantes o prácticamente desapercibidas
Antes de salir de senderismo en un día húmedo para recoger setas, hay que tener muy en cuenta que no todas son comestibles y que muchas de ellas se parecen a setas que en realidad te pueden provocar la muerte.
Para ello, hay que consultar con un experto o mirar una guía especializada para conocer realmente cuáles se pueden comer y las que debemos olvidarnos de tocar. La mayoría de los que recogen hongos saben por experiencia los que se puede comer o iniciaron un entrenamiento visual y cognitivo para poder llevarlos a su casa.
Las setas más mortales de la tierra:
1. El embudo de márfil: Su veneno produce un efecto de sudoración que deriva en náuseas, vómitos, fiebre y diarrea.
2. Cortinario de montaña: no es alucilógena a pesar de que mucha gente la cataloga así. Es letal en dosis de 100 a 150 gramos
3. Webcap Mortal: dolor en los riñones, en la cabeza, vómitros y micción frecuente.Tomarla en cantidades de más de 100 gramos es mortal. No existe un antídoto.
4. Cicuta Blanca: es una de las setas más comunes ingeridas y que produce malestar. Muy parecida a la oronja verde con los mismo síntomas.
5. Oronja verde: es el hongo venenoso más comúnmente ingerido, ya que se parece mucho a variedades comestibles.Los síntomas pueden desaparecer en dos días, pero lo normal es un estado de coma o la muerte.
6. Ángel destructor: es una seta blanca y suave. La mitad de este hongo es mortal y letal.