Frenar el avance de la Vespa velutina se consolida como el primer objetivo del colectivo de apicultores. Lo afirmó este sábado Armando Rodríguez Losada, presidente de la Asociación Valdeorresa de Apicultores, momentos antes de comenzar la asamblea ordinaria que se desarrolló en el local social Santa Lucía, de Vilamartín de Valdeorras.
"Estamos empezando a combatila. Pretendemos involucrar aos concellos", dijo el portavoz de los productores de miel de la comarca. Recordó la reunión que hace 10 días se desarrolló en el Concello de O Barco de Valdeorras, asistiendo alcaldes pedáneosy productores de distintas partes de la comarca, así como los llegados de concellos leoneses próximos. La siguiente cita será en A Rúa. "Queremos traer aos alcaldes", indicó Armando Rodríguez. Añadió que pretende involucrar al regidor rues para que implique a los demás, así como a diferentes asociaciones y colectivos valdeorreses.
El problema es grave. Las estimaciones del colectivo valdeorrés de apicultores cuantifican en aproximadamente 25 los nidos primarios destruidos en la zona. A esta cantidad hay que añadir otros tantos secundarios, además de las 800 reinas capturadas con las trampas colocadas.
La directiva de la asociación acudió este sábado con varios envases de agua, similares a los repartidos en la reunión de O Barco, preparados para capturar reinas y planteó que los interesados pueden elegir entre el citado método, la colocación de las trampas que distribuye la Xunta o bien utilizar alguna marca de líquido atrayente.
El problema de la velutina no es el único que afronta el sector. Los apicultores también tienen la mirada puesta en el adelanto de la floración atribuido al cambio climático. Esta circunstancia está propiciando que las abejas salgan del letargo invernal y comiencen a buscar un alimento que va a depender de las condiciones meteorológicas. Si estas empeoran, deberán ser los apicultores los que se ocupen de alimentar las colmenas, con el consiguiente coste añadido que conlleva.
También se refirió Armando Rodríguez al interés que despierta la actividad apícola. Sobre este particular, explicó que en la lista de asociados de la Asociación Valdeorresa de Apicultores incluye a 83 productores, en estos momentos. Esta cifra incluye las últimas altas, que se aproximan a la media decena. "Vai a máis", afirmó el presidente del colectivo refiriéndose a la actividad.
La asamblea se desarrolló tras un año irregular en la producción de miel. Si no fue mala en las zonas bajas sí castigó los colmenares situados en parajes de montaña, según apuntaban en el sector. En estos lugares, el descenso fue estimado en torno al 40 %, debido fundalmente a la pérdida del mielato del carballo por las condiciones meteorológicas adversas.
