La motobomba que la Consellería do Medio Rural entregó en julio de 2019 al Concello de O Barco de Valdeorras para ser usada por el Grupo de Emerxencias Supramunicipal (GES) regresará a manos de la Xunta. En esta dirección apunta un escrito remitido recientemente por la Alcaldía barquense al Ejecutivo autonómico, por el cual le informa de su decisión de revertir la cesión por sus muchas deficiencias.
El vehículo, que lleva meses en un taller mecánico de Arcos (Vilamartín), donde fue sometido a reparaciones por una cuantía superior a los 2.000 euros, según fuentes próximas a Medio Rural, no superó la revisión que hace poco más de 10 días hicieron los operarios del GES. Estos insisten en que la motobomba sigue presentando importantes deficiencias, con los manómetros de presión y los aspersores superiores averiados, un asiento del conductor que no puede ser regulado, la total ausencia de equipamiento, un chasis torcido o unas luces lanzadestellos de color naranja.
Coste
Según las valoraciones que maneja el Concello, poner el coche en condiciones tendría un coste no inferior a los 15.000 euros, tal y como pudo saber este diario. Además, esta cantidad se vería incrementada con el coste de adquisición de los equipos necesarios para prevención y extinción de los incendios forestales sin que, realizadas todas estas mejoras, reuniese garantías suficientes para ser usado con seguridad.
No es la primera vez que los integrantes del GES consideran que la motobomba carece de unas mínimas condiciones de seguridad para ser utilizadas. Pocos meses después de que el Concello de O Barco la recibiese en 2019, este informaba a la Xunta que debería ser dada de baja por sus múltiples deficiencias, siendo llevada al taller.
La solicitud de reversión partió del Concello pocos días después de que el concejal del BNG, Xesús Vilasánchez, preguntase en un pleno de la Corporación municipal por la situación en que se encuentra la motobomba, considerando que “segue sin usar, anque houbera vido moi ben na vaga de lumes do verán”. Fue contestado por el alcalde Alfredo García, quien indicó que solo aceptaría el vehículo “cando estea en condicións”. A su vez, las mismas fuentes próximas a la Administración consultadas consideran que la motobomba está en condiciones de prestar servicio al GES tras unos trabajos de reparación de más de 2.000 euros y de ahí que insistan en solicitar al Concello que la retire del entorno del taller, donde continúa.
