La restauración de las bóvedas de la iglesia de San Pedro, en Correxais (Vilamartín de Valdeorras), recibió el último visto bueno. La Consellería de Cultura, Educación e Universidade anunció este lunes la licitación de unos trabajos que sus técnicos presupuestaron en 127.160 euros, fijando para su ejecución un periodo que deberá ser inferior a los seis meses.
De origen románico, la iglesia tiene planta de cruz latina. En ella destaca el retablo mayor, con un conjunto de pinturas que representan la Navidad, cuatro santos y las cuatro virtudes. Posee una torre cuadrangular en la que puede verse una inscripción apuntando que fue levantada en 1691, reinando Carlos II y siendo abad Antonio de Hoyos. Ya en el año 2016, el valor cultural que posee la construcción llevó a la Xunta a incluirla en el Catálogo del Patrimonio Cultural de Galicia.
Los trabajos contemplan la restauración de las bóvedas de crucería que fueron elaboradas en madera de castaño y que pueden observarse en las capillas laterales del crucero.
Proyecto
El proyecto de rehabilitación incluye la fijación, consolidación y protección de la policromía, así como el apuntalamiento de los nervios y la reparación de aquellos que presenten alguna rotura. Además, los elementos que desaparecieron serán sustituidos por reproducciones en madera, recuperando el retablo y eliminando los rellenos de yeso. Una vez finalizadas estas labores darán comienzo la limpieza, desinsectación y tratamiento de consolidación.
“As bóvedas de San Pedro de Correxais están efectuadas con madeira de castiñeiro e, a pesar da súa resistencia, presentan múltiples alteracións que afectan ó seu estado de conservación”, reflejan las bases de la licitación. Entre los factores que afectaron negativamente a las bóvedas y cuya corrección, acometida en 2003 por la Dirección Xeral de Patrimonio Cultural, deberá ser comprobada. Están las filtraciones de agua, los ataques de insectos xilófagos y la falta de mantenimiento de las cubiertas de la iglesia, con losas movidas o rotas. A su vez, las pinturas tienen problemas de decoloración provocados por muy diferentes causas.
Convento
En el entorno de la iglesia de San Pedro están los restos del convento de los Trinitarios, cuya construcción finalizó en 1727 y que se encuentra en un avanzado estado de deterioro, quedando apenas algunas paredes ruinosas de la construcción inicial. De titularidad particular, fuentes vecinales de Correxais mostraban recientemente su preocupación ante la posibilidad de que pueda venirse abajo, sobre la calle, alguna de las fachadas. A su vez, desde el Consistorio insisten en que los restos “están en manos privadas”, sin que fructificasen las gestiones iniciadas para buscar una solución.
