Las empresas Gaélica Solar SL y New Energy GMBH proyectan construir una planta de biomasa en el municipio de A Veiga. El proyecto, que recibió el visto bueno unánime de la Corporación municipal, supone una inversión de 12 millones de euros. Prevé utilizar 28.000 toneladas de monte bajo al año y destinar el calor generado a un invernadero de Hortoflor, preparado para cultivar frutas fuera de temporada. El alcalde, Fernando Fernández, apuntó que esta iniciativa será presentada ante Medio Rural.
La utilización del monte bajo para generar electricidad es el eje del proyecto que elaboró la unión temporal de empresas formada por Gaélica Solar SL y NEW Energy GMBH para el municipio de A Veiga. Así lo apuntó el alcalde, el socialista Fernando Fernández, quien añade que estos trabajos también podrían desarrollarse en otras zonas de O Bolo y Viana.
El proyecto supone una inversión aproximada de 12 millones de euros y cuenta con el visto bueno unánime de la Corporación municipal, que lo analizó en la última sesión plenaria. En los últimos meses, el alcalde también mantuvo contactos con la mayoría de los presidentes de las juntas rectoras de los montes de mano común, quienes le transmitieron su apoyo, según apuntó Fernando Fernández.
Sin embargo, falta el respaldo de la Consellería de Medio Rural, que convocará un concurso para adjudicar 40 megavatios en la comunidad autónoma. El alcalde, apuntó la existencia de un segundo proyecto, que podría competir con el que maneja el Concello.
La planta de biomasa generará dos megavatios de electricidad y utilizará agua bombeada mediante energías renovables: solar y eólica, con objeto de que funcione constantemente.
Por otra parte, generará dos tipos de residuos: calor y cenizas. En este capítulo, entra en juego la empresa ourensana Hortoflor. El proyecto prevé utilizar las altas temperaturas en un invernadero diseñado para las inmediaciones de la industria eléctrica. Las cenizas serían empleadas en una planta de envasado, también gestionada por la empresa.
En referencia al invernadero de Hortoflor, el alcalde resaltó que en su interior se cultivarían frutas fuera de temporada. Con su apuesta por este tipo de cultivos, los promotores pretenden aprovechar el mayor precio que estos productos tienen en los mercados.
El proyecto prevé crear casi cuarenta puestos de trabajo
El regidor de A Veiga, Fernando Fernández, resaltó la importancia del proyecto en el que trabaja el Concello. La gente lo ve bien, aseguró. Subraya que sus beneficios no se reducen a la creación de puestos de trabajo -38, según el proyecto-, pues también entraña importantes mejoras para los montes del municipio.
Permitirá la limpieza de los montes, aseguró el regidor, quien resaltaba que la biomasa se obtendrá del monte bajo, reduciendo considerablemente el peligro de los incendios.
También prevé beneficiar a los aficionados a la caza, pues la población cinegética aumentará con las labores de desbroce, según sus cálculos.
La incidencia del proyecto en la apuesta turística del Concello también fue sopesada por el equipo de gobierno. A este respecto, el alcalde considera que este sector también podría verse beneficiado pues el monte estará más limpio.
En referencia al impacto visual de la planta de biomasa, ésta deberá ubicarse en las inmediaciones del pueblo de A Veiga, pues precisa estar localizada cerca de las líneas de media tensión, al objeto de dar salida a la electricidad. En la zona hay dos, las de Prada-A Veiga y la Alto do Covelo-A Veiga.
Para funcionar, la planta de biomasa necesita 28.000 toneladas de biomasa al año.
Los técnicos municipales de A Veiga cifran la superficie de los montes de mano común del municipio en 15.500 hectáreas.
La planta de biomasa ocupará una parcela de 10.000 metros cuadrados.
El proyecto supone una inversión aproximada de 12 millones de euros y cuenta con el visto bueno unánime de la Corporación municipal, que lo analizó en la última sesión plenaria. En los últimos meses, el alcalde también mantuvo contactos con la mayoría de los presidentes de las juntas rectoras de los montes de mano común, quienes le transmitieron su apoyo, según apuntó Fernando Fernández.
Sin embargo, falta el respaldo de la Consellería de Medio Rural, que convocará un concurso para adjudicar 40 megavatios en la comunidad autónoma. El alcalde, apuntó la existencia de un segundo proyecto, que podría competir con el que maneja el Concello.
La planta de biomasa generará dos megavatios de electricidad y utilizará agua bombeada mediante energías renovables: solar y eólica, con objeto de que funcione constantemente.
Por otra parte, generará dos tipos de residuos: calor y cenizas. En este capítulo, entra en juego la empresa ourensana Hortoflor. El proyecto prevé utilizar las altas temperaturas en un invernadero diseñado para las inmediaciones de la industria eléctrica. Las cenizas serían empleadas en una planta de envasado, también gestionada por la empresa.
En referencia al invernadero de Hortoflor, el alcalde resaltó que en su interior se cultivarían frutas fuera de temporada. Con su apuesta por este tipo de cultivos, los promotores pretenden aprovechar el mayor precio que estos productos tienen en los mercados.
El proyecto prevé crear casi cuarenta puestos de trabajo
El regidor de A Veiga, Fernando Fernández, resaltó la importancia del proyecto en el que trabaja el Concello. La gente lo ve bien, aseguró. Subraya que sus beneficios no se reducen a la creación de puestos de trabajo -38, según el proyecto-, pues también entraña importantes mejoras para los montes del municipio.
Permitirá la limpieza de los montes, aseguró el regidor, quien resaltaba que la biomasa se obtendrá del monte bajo, reduciendo considerablemente el peligro de los incendios.
También prevé beneficiar a los aficionados a la caza, pues la población cinegética aumentará con las labores de desbroce, según sus cálculos.
La incidencia del proyecto en la apuesta turística del Concello también fue sopesada por el equipo de gobierno. A este respecto, el alcalde considera que este sector también podría verse beneficiado pues el monte estará más limpio.
En referencia al impacto visual de la planta de biomasa, ésta deberá ubicarse en las inmediaciones del pueblo de A Veiga, pues precisa estar localizada cerca de las líneas de media tensión, al objeto de dar salida a la electricidad. En la zona hay dos, las de Prada-A Veiga y la Alto do Covelo-A Veiga.
Para funcionar, la planta de biomasa necesita 28.000 toneladas de biomasa al año.
Los técnicos municipales de A Veiga cifran la superficie de los montes de mano común del municipio en 15.500 hectáreas.
La planta de biomasa ocupará una parcela de 10.000 metros cuadrados.
