El retraso en la vacunación contra la enfermedad animal de la lengua azul preocupa en el sector ganadero. Una prueba de ello es el escrito que Unións Agrarias remitió a la Dirección Xeral de Gandería trasladándole que esta sitaución podría provocar que, a partir del 15 de julio, no sea posible sacar las reses de las explotaciones y “poder comercializalas para sacrificio”
El problema afecta especialmente a la provincia, pues el verano es la época de mayor consumo en restaurantes y a nivel privado, una circunstancia que lleva a las granjas a programar los partos para estos meses. Además, la central dice que “se verán perxudicadas as explotacións de vacún que on puideron imunizar ós seus animais por ser menores de tres meses e que, agora, moitos meses despois e en idade de sacrificio ou de mandar a cebadeiros, non poden ser comercializados”.
La central explica que en el servicio veterinario de la Xunta “recoñecen estar desbordados e faltos de persoal para acometer con garantías a campaña de vacinación” y solicita al director xeral de Gandería que los equipos de trabajo sean dotados adecuadamente para resolver el bloqueo. UU. AA. considera que, de no ser así, “as explotacións terán que pagar do seu peto un xervizo de vacinación privado, cando é a Xunta a que ten competencia exclusiva”.
La central solicita que, en tanto no se desatasque la situación, el periodo de carencia sea ampliado más allá del próximo viernes, al menos en Galicia, buscando reducir los daños en las rentas de las explotaciones. UU.AA. explica que la zona más afectada es el Macizo Central, con concellos problemáticos como Viana do Bolo, con gran producción ovina y de vacuno.
