Una médica del Centro de Saúde de O Barco será juzgada tras haber diagnosticado intoxicación alimentaria por consumir empanada a un paciente con problemas de hipertensión, que luego murió. Los familiares le piden un año y medio de prisión, tres de inhabilitación y 230.000 euros de indemnización.
Un año y medio de prisión, tres de inhabilitación y 230.000 euros de indemnización. Esa es la pena que solicita una familia de O Barco a un médica del Centro de Saúde de la localidad, según dio a conocer el Defensor del Paciente, tras el fallecimiento del hombre en el Complexo Hospitalario de Ourense. Los familiares de la víctima, de 42 años, denunciaron el caso en un Juzgado de Ourense que inicialmente archivó las diligencias, pero posteriormente la Audiencia admitió un recurso y ordenó investigar el asunto.
La médica, según dio a conocer el Defensor del Paciente en un escrito, atendió al hombre en Urgencias con cefalea intensa de 12 horas de evolución, aparte de otros signos y síntomas, indica la nota, añadiento que, sin embargo, la doctora lo atribuyó a una intoxicación por ingesta de empanada y le remitió a su domicilio. El Defensor del Paciente apunta que las pruebas a las que fue sometido fueron incompletas y muy básicas, de manera que en la hoja de urgencias no constan ni la tensión arterial, ni la temperatura, ni el pulso del paciente que era hipertenso y que además no consta la exploración de fondo de ojo ni neurológica. El hombre empeoró en su domicilio y fue trasladado al CHOU, donde falleció días después.
La médica, según dio a conocer el Defensor del Paciente en un escrito, atendió al hombre en Urgencias con cefalea intensa de 12 horas de evolución, aparte de otros signos y síntomas, indica la nota, añadiento que, sin embargo, la doctora lo atribuyó a una intoxicación por ingesta de empanada y le remitió a su domicilio. El Defensor del Paciente apunta que las pruebas a las que fue sometido fueron incompletas y muy básicas, de manera que en la hoja de urgencias no constan ni la tensión arterial, ni la temperatura, ni el pulso del paciente que era hipertenso y que además no consta la exploración de fondo de ojo ni neurológica. El hombre empeoró en su domicilio y fue trasladado al CHOU, donde falleció días después.
