La portavoz de la oposición del PPdeG y ex alcaldesa de Vilamartín, María Jesusa Candal Jarrín, solicitó los saldos de las operaciones con entidades bancarias del Concello. Realizó esta petición tras las críticas vertidas contra su gestión por el actual regidor del PSdeG-PSOE, Enrique Álvarez Barreiro, quien informó a la Corporación municipal de una deuda municipal de 854.346 euros. '¿Qué supone esta cantidad para un Concello', dijo la concejala, quien comparó esta cantidad con las hipotecas de más de 100.000 euros que pagan muchas familias.
María Jesusa Candal criticó al actual alcalde por quejarse de los 3.186 euros que el Concello abonó por las esquelas del fallecimiento de Manuel Candal, padre de la portavoz 'popular', quien ayer aseguró que 'fue el mejor alcalde de Vilamartín'.
En su intervención plenaria, el alcalde vilamartinés también se quejó del salario de aproximadamente 41.000 euros que cobraba el anterior tesorero y marido de María Jesusa Candal, fallecido hace meses. 'Cobraba en relación a lo que le correspondía y si tenía algún complemento, lo tuvo que aprobar el Pleno', dijo la concejala del PP.
El consumo eléctrico de la piscina municipal también fue puesto sobre la mesa en la última sesión. El alcalde, Enrique Álvarez Barreiro, afirmó no tener constancia de que el concesionario de las instalaciones hubiera abonado los recibos, tal y como estipula el contrato. La concejala ayer aseguró que el Concello siempre descontó su importe de la cantidad abonada por las arcas municipales. 'Algún año tuvo que ingresar pequeñas cantidades', dijo.
María Jesusa Candal reprochó duramente las críticas de su sucesor en la Alcaldía de Vilamartín, que calificó de 'mentira tras mentira.Cuando se entra en el Concello se asume lo bueno y lo malo'.
Además, recordó que el anterior equipo de gobierno fue el que tramitó la redacción del Plan Xeral de Ordenación Municipal, las obras de accesos a las viñas, los Planes Provinciales, el Plan de Cooperación o el Aula de Lectura, entre otras iniciativas.
En su intervención plenaria, el alcalde vilamartinés también se quejó del salario de aproximadamente 41.000 euros que cobraba el anterior tesorero y marido de María Jesusa Candal, fallecido hace meses. 'Cobraba en relación a lo que le correspondía y si tenía algún complemento, lo tuvo que aprobar el Pleno', dijo la concejala del PP.
El consumo eléctrico de la piscina municipal también fue puesto sobre la mesa en la última sesión. El alcalde, Enrique Álvarez Barreiro, afirmó no tener constancia de que el concesionario de las instalaciones hubiera abonado los recibos, tal y como estipula el contrato. La concejala ayer aseguró que el Concello siempre descontó su importe de la cantidad abonada por las arcas municipales. 'Algún año tuvo que ingresar pequeñas cantidades', dijo.
María Jesusa Candal reprochó duramente las críticas de su sucesor en la Alcaldía de Vilamartín, que calificó de 'mentira tras mentira.Cuando se entra en el Concello se asume lo bueno y lo malo'.
Además, recordó que el anterior equipo de gobierno fue el que tramitó la redacción del Plan Xeral de Ordenación Municipal, las obras de accesos a las viñas, los Planes Provinciales, el Plan de Cooperación o el Aula de Lectura, entre otras iniciativas.
