Habitar entre estos muros de lujo e historia es posible en alguna de estas construcciones, que actualmente están transformados en casas rurales que conservan la esencia de sus orígenes y sirven de descanso al viajero.
La arquitectura palaciega es símbolo del patrimonio gallego y nos recuerda cómo vivían las clases más altas de hace siglos en el rural gallego. Habitar entre estos muros de lujo e historia es posible en alguna de estas construcciones, que actualmente están transformados en casas rurales que conservan la esencia de sus orígenes y sirven de descanso al viajero.
Pazo de Armariz
Su construcción dota del siglo XIX y dicen que perteneció al Marquesado de Aguilar. Prueba de ello podrían ser las señales que hay cerca de una antigua fortaleza. Hoy, la Rectoral de Armariz, en Nogueira de Ramuín, es una casa rural en la que disfrutar del paisaje que ofrece la Ribeira Sacra como hace siglos lo hicieron los nobles que habitaron entre sus muros. El alojamiento dispone de seis habitaciones.
Pazo de San Damián
Un cura de Abruciños, don Fernando de Boán, fue el artífice de este pazo que en sus inicios se llamó Pousa de Cacabelos o Pazo da Costa, situado en Amoeiro. El estado de abandono de esta joya arquitectónica fue mejorado hace algunos años, conservando la esencia de sus inicios. De hecho, la decoración de las habitaciones recuerda a las antiguas estancias de hace siglos. Parte del encanto del lugar es la ermita que alberga en su interior, a disposición para la celebración de bodas. También cuenta con un restaurante de gran capacidad para todo tipo de eventos.
Pazo de Bentraces
Mucho más antigua es esta construcción palaciega en Bentraces, que data del siglo XV. Estos muros fueron morada episcopal del Monasterio de Celanova y pasó por diferentes etapas arquitectónicas, pasando de Casa Señorial hasta el oasis de tranquilidad de hoy. Más de 20.000 metros cuadrados de jardín custodian un pazo de seis habitaciones en las que prima el lujo de antaño. La decoración es clásica y en su interior se albergan numerosas antigüedades y obras de artesanía gallega.
Pazo de Santa Baia de Berredo
Tiene los elementos característicos del típico pazo gallego: palomar circular, alpendre y hórreo. El conjunto arquitectónico de Santa Baia de Berredo se encuentra en el concello de A Bola. El edificio no tiene nada que ver con sus inicios, ya que al venderse quedó dividida entre dos familias. Según la web de Turismo, los usos actuales se reducen a casa de labranza.
Pazo de los Condes
Es del siglo XVII y actualmente lo ocupa la Oficina de Turismo de Ribadavia y el Centro Sefardí. El Pazo de los Condes perteneció a los Sarmiento, que consiguieron su título nobiliario gracias a los servicios prestados a los reyes católicos durante la Reconquista. Descubrir sus secretos es posible en estas fechas, ya que durante la fiesta de la Istoria se abre la parte superior que comunica la plaza mayor con la zona de la Puerta Nueva.
