El embalse de O Vao, junto a los ríos Bibei y Camba, dibuja un coqueto valle en el que se asienta buena parte del municipio vianés. Con más de medio centenar de núcleos de población, “la magia verde de Galicia”, como denominan muchos a esta localidad del sureste ourensano, destaca por su compleja y majestuosa orografía.
La Torre do Homenaxe, construida en la Edad Media, marca el epicentro de este municipio que disfrutó durante décadas de feudos y gobiernos propios. Muchos son los tesoros que esconden las montañas vianesas, por lo que resulta casi imposible conocerlos en su totalidad.
Museo da Nieves
Situado en Quintela do Pando, este museo alberga más de 700 piezas de madera talladas a mano por la artista Nieves Fernández, oriunda del lugar. Comenzó creando pequeños juguetes para sus hijos y ahora cuenta con una amplia colección compuesta por máscaras tradicionales, animales y otras formas variopintas que como ella misma indica, “me pide la naturaleza”. Un lugar digno de visita en el que reposan incontables horas de trabajo y el amor de una mujer cuya vida está fuertemente ligada al lugar.
Mirador de Quintela do Pando
En lo más alto de esta aldea, situada a unos ocho kilómetros de la cabeza del municipio, se levanta un modesto mirador desde el que se puede divisar un escultural paisaje protagonizado por el embalse de O Vao. Situado a una altura que ronda los 900 metros, es un lugar perfecto para hacer un alto en el camino, divisar algún que otro animal salvaje o disfrutar de los silencios de la naturaleza.
Solbeira
La visita a esta aldea vianesa es obligada para todos aquellos que llegan al municipio desde A Gudiña. En sus calles se levantan bellas esculturas forradas con piedras elaboradas por Abelardo Prado Amor, un vecino del lugar que a sus 84 años continúa engalanando de una manera muy peculiar su pueblo. Otras aldeas como Pixeiros o Fradelo también acogen obras de Abelardo, pero es Solbeira donde se puede disfrutar de decenas de obras de este agricultor jubilado que dedica todo su tiempo a hacer de su aldea un lugar especial y merecedor de una visita pausada.
Mirador del Bibei
En tierras de la aldea de San Cibrao, a escasa distancia de Viana, se levanta otro humilde mirador desde el que se puede disfrutar de una de las mejores vistas del núcleo de Viana. Desde él, existe la impresión de que la localidad es una pequeña isla abrazada por los ríos Camba y Bibei. Una estampa hermosa durante el día pero también cuando el sol se esconde, momento en el que el embalse de O Vao semeja un espejo en el que se mira la pequeña Viana.