El COB entrena esta semana, la del parón por las ventanas de selecciones, con la tranquilidad que le dio la victoria ante el Oviedo. Un partido en el que los 31 puntos de Justin Turner, las canastas clave de Samu Rodríguez o la aportación de Ivica Radic, Javi López o Karamo Jawara se llevaron las fotos o los titulares. Es lo habitual. Como en cualquier deporte la brillantez de los ataques centra las miradas. En el equipo ourensano Mindaugas Kacinas es el antagonista, al espectáculo y a los rivales. Un jugador capaz de minimizar a los mejores atacantes de la LEB Oro. Pieza clave del COB y vital cuando su equipo alcanza el mejor nivel.
“Para nosotros es una garantía y un lujo. Es un jugador de equipo grande y defensivamente, para mí, el mejor jugador de la liga”, explica Félix Alonso. Y añade: “Es el primero en llegar a los entrenamientos y el último en marcharse. Y así todos los días. Nos da tranquilidad tenerlo en el equipo. Un día puede meter 20 puntos, pero no es un anotador, no es lo normal. Es un jugador que destaca cuanto mejor sea el equipo en el juega y que defensivamente es una sombra para cualquier jugador que le asignes”.
Contra Horton
El sábado fue su último “recital” defensivo. Enfrente tenía a uno de los mejores anotadores de la liga, el alero Demetric Horton. Era la pieza fundamental del Oviedo y llegaba al Pazo con más de 15 puntos por partido y más de 15 créditos de valoración. Se fue con 5 de valoración y “maquillando” sus números con un triple final sobre la bocina que ya no valía para nada. Kacinas fue su defensor. 3 puntos y 10 de valoración le restó a Horton.
Pero incluso por encima de su nivel defensivo está su capacidad para hacerlo ante jugadores de distintas posiciones. Cuando el rival tiene un foco claramente localizable Kacinas es el defensor. Puede ser un base, como Clevin Hannah; escoltas, como Spencer Littleson o “combos” como Jon Gudmudsson. Kacinas los defiende a todos.
“Tácticamente, es buenísimo y técnicamente me quedaría con los pies que tiene, se mueve siempre perfecto y por momentos parece una sombra para los jugadores que defiende. Ha habido partidos en los que ha dado auténticos recitales”, asegura su entrenador.
Littleson, Hannah o Gudmundsson
El primero fue en la segunda jornada. Spencer Littleson venía de meter 15 puntos en el debut ante el Fuenlabrada y su equipo de dar la campanada. Ante el COB se quedó en 5 puntos y fue el único partido en el que bajó de los dobles dígitos en las 10 primeras jornadas de liga.
Quizá el despliegue defensivo más “redondo” fue ante el Alicante. El COB llegaba con presión al partido y el rival tenía dos claros referentes ofensivos, Brad Davison y Jon Gudmudsson. A Kacinas le asignaron al islandés y lo “secó”. Antes de ese partido promediaba 14,5 puntos por partido y en Ourense metió 5. La calculadora cobista le restó casi 10 puntos a su rival.
Más recientemente, ante el Menorca, fue uno de los pares que tuvo Clevin Hannah y el referente en el entramado de ayudas y “trampas” que se había preparado. El trabajo defensivo del COB fue impecable y dejó a uno de los máximos anotadores de la liga metiendo solo una canasta en juego pese a estar 38 minutos en pista.
En eso que algunos llaman “lo que no se ve”, el COB tiene al mejor especialista en hacer invisibles a sus rivales.
