Baloncesto

Una LEB Oro a la italiana

photo_camera Balón al aire en un partido de la Serie A2 italiana entre Napoli y Scafati.
COB y Lleida pelearán por la ampliación de la liga e imitar un formato que ya funciona en Italia desde hace años y que adoptarán la próxima temporada otras ligas

El COB es equipo de LEB Plata deportivamente desde hace semanas, pero desde el primer momento, y en boca del presidente, Camilo Álvarez, se avanzó que el club haría todo lo posible por conseguir una plaza en la LEB Oro para la próxima temporada. Algo similar pasa en Lleida, donde también anunciaron "batalla" para evitar el descenso de otro proyecto solvente y con apoyo social. Dos descensos traumáticos en una temporada cruel y con números tan complicados de explicar como que los dos conjuntos acabaron descendiendo pese a ganar más partidos que otros equipos que lograron la permanencia o incluso lucharon por el play off de ascenso.

Dos clubes históricos de la liga y del baloncesto nacional cuyas plazas ocuparán los ascendidos Iraurgi y Prat. El otro ascendido, el filial del Barcelona, renunciará a la plaza, lo que dejará la liga en 18 equipos. 

Ese es el formato que prefieren la mayoría de los clubes y que se aprobó en las bases de competición para la campaña 2020/21, pero tanto COB como Lleida apretarán para replantear una competición que facilite la continuidad de los proyectos más sólidos. Sin excluir a nadie, pero tratando de potenciar un formato que minimice riegos de caída a una competición como la LEB Plata, en la que proyectos profesionales corren riesgo de desaparición si no consiguen rápido el ascenso.

De hecho el aumento en el número de equipos en las ligas profesionales es un formato cada vez más habitual en todas las competiciones. Sin ir más lejos, la próxima temporada el fútbol español estrenará un formato competitivo que ayude a estabilizar los proyectos profesionales incluso fuera de las dos primeras categorías. Los hasta ahora 122 equipos que había entre Primera División y Segunda B pasarán a ser más de 170 con categorías divididas en grupos. 

En baloncesto el ejemplo más parecido es el de la Serie A2 italiana (equivalente a la LEB Oro). Por el mismo motivo, para evitar que los clubes que descendían se diluyesen o incluso desapareciesen, se optó por favorecer a la segunda categoría repescando a clubes solventes y con apoyo para ampliar la liga. Desde 2015 la segunda categoría del baloncesto italiano se disputada con dos grupos y esta misma campaña la formaban en total 27 equipos. 

Por debajo, en la tercera categoría (Serie B), ya no es considerada profesional y sirve como promoción para los jugadores italianos. De hecho en esa categoría solo se permiten jugadores nacionales.

Bélgica y Holanda también han tomado nota y desde la próxima temporada agruparán sus máximas competiciones para formar dos grupos y favorecer a los proyectos profesionales en una liga más atractiva.

Una ampliación de la LEB Oro que no solo favorecería a COB y Lleida, otros proyecto de LEB Plata como Navarra, Rioja, Cantabria o Menorca podrían tener acceso a la liga y estabilizar proyectos que se resquebrajan tras los descensos o que corren riesgo de difuminarse si no consiguen ascender.

Clubes, ciudades y aficiones estables para una LEB Oro que pese a tener las bases de competición aprobadas podría "retocarlas" perfectamente y cambiar el formato. El pasado verano ya pasó y aunque estaban "aseguradas" dos plazas de ascenso a la Liga ACB se optó por aceptar la disminución a solo una por el "bien" de la competición y regular los ascensos y descensos en las campañas siguientes.

Ahora COB y Lleida son los "quijotes" que pelearán por una LEB Oro con menos proyectos de ida y vuelta más clubes profesionales.

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