Y, el momento que no había llegado, llegó. El COB se cayó con todo el equipo en el coso de Illumbe. Ni un primer cuarto igualado gracias a un acierto mayúsculo en los triples (alguno medio milagroso) sirvió. El resto, para aprender. Porque con los puntos de Turner y Jawara saliendo de la enfermería todavía, los ourensanos tienen que dar una versión de 10 sobre 10 en defensa para ganar este tipo de partidos, a este tipo de rivales. Incluso compramos una versión de 9 sobre 10. Pero lo de San Sebastián fue flojo. Demasiado. Faltó morder. Ni rastro de la mirada del tigre, que diría Apollo Creed a Rocky Balboa.
Y se notó desde el principio. Incluso alguna acción defensiva aislada donde se apretó más sirvió para, por contraste, notar la diferencia abismal. La zona cobista tuvo un agujero de proporciones bíblicas. Los “5” no estuvieron. Parecían estar en una especie de reto sobre quién lo podría hacer peor. Salvar se salvaron Adika, Mendikote y Palazuelos. El resto no tuvieron el día. Si a eso le añades un Gipuzkoa que estaba en tan buena línea como tú, pues la receta se le indigesta al más pintado. Los vascos tienen mucho y bueno. La valoración conjunta de los equipos habla por sí misma. Un bofetón a mano abierta que duele, sí, pero nadie muere de esto.
Porque, con la parte negativa por delante, dramas los justos. Una muy mala tarde en la oficina. Pero ya está. Al COB le faltan dos “bichos”. Ningún rival ha tenido que pagar un peaje similar hasta la fecha. Y el balance sigue siendo bueno y tremendamente “firmable” antes de empezar el curso. El cobismo se habrá disgustado, pero ya está pensando en el martes. Mal día, sí. Pero el Pazo vela armas para convertir el “mosqueo” en ánimos. La LEB Oro es una guerra larga, con batallas que sonríen y otras que hieren. Lo sabemos. Así que toca lamerse las heridas y afinar la voz para dejársela ante un Tizona con acento ourensano.
Se deberían recuperar soldados para la causa. Aquí no sobra nadie. Y con esas armas tratar de superar a un rival que tiene nombre de arma para darle un toque más bélico a todo esto.
Derrota para aprender en San Sebastián. Imagen difícil de no mejorar. Desde mañana empezará a trabajar el COB en cambiar las tornas. Porque el esfuerzo no se negocia y un borrón, por gordo que sea, no empaña el trabajo.
