Fiesta antes, durante y, veremos, si después. El Pazo se prepara para una jornada intensa a más no poder. Dentro del menú baloncestístico y festivo, el plato fuerte es el derbi gallego entre COB y Básquet Coruña. Un duelo de objetivos y ambición cuando la recta final de la competición asoma por el horizonte. Los ourensanos quiere mantenerse en la lucha por la novena plaza, la última que abre la puerta de los play off. Los herculinos, un paso más. Son líderes (con el Tizona y su partido más) y un triunfo en el Pazo les acerca al ascenso directo. Casi nada. Y, en las gradas, ambiente de gala. Hermandad entre vecinos, pero una vez el balón se ponga en juego, aquello de “amiguiños sí, pero a vaquiña polo que vale”. Además, los coruñeses le han comido la tostada a los ourensanos en los últimos enfrentamientos. Y con contundencia.
El COB afronta el examen con todo. Bendita rutina de, al margen de golpes y dolores, tener toda la plantilla disponible. Y Félix Alonso los va a necesitar. No es que tenga muchos secretos o claves ocultas el equipo ourensano en su plan de partido. Sota, caballo y rey. Justin Turner tiene que ser esa referencia ofensiva de anotar y generar y el juego interior aparece como una de las claves para ganarle la partida en la zona a los pivots herculinos. Ahí se decidirá parte de la batalla.
Intensidad
Lo que no puede permitirse el COB es salir a verlas venir. Ni 10 minutos ni uno. La puesta en escena de Fuenlabrada, prohibida. Ante un rival que maneja un caudal ofensivo tan grande (el que más puntos por partido anota) el tren de la victoria se te puede ir muy lejos si nos estás al 100%.
Ahí, el acierto desde la larga distancia, los temidos tiros libres y el dominio en el rebote, aparecen como posibles aliados o enemigos dependiendo cómo vaya la tarde.
Al otro lado, un líder. Y si después de 27 jornadas vas primero en esta competición, es por algo. Los de Diego Epifanio tienen el histórico ascenso cerca, aunque ahí atrás hubo nervios y dos derrotas seguidas. Parecen haber recuperado el pulso con sendos triunfos y tienen la iniciativa en esa pelea por la gloria.
De nombres van sobrados. Calidad y cantidad. Huskic, Barrueta, Jakovics, McDonnell o Diagne aparecen como “cromos” de gran valor y rendimiento sobresaliente. Tratarán de hacer su juego, ofensivo y anotador, que compense ciertas lagunas defensivas propias de una manta que no puede tapar todo durante todo el rato.
Un partido en mayúsculas. Con el precedente de la tarde ante el Estudiantes como ilusión, el COB buscará seguir con constantes vitales en la lucha por el play off. El que pueda que no se lo pierda. El que no pueda, que se lo cuenten al momento. Derbi gallego en el Pazo. En juego, una victoria para continuar creyendo.
