El futuro del rural pasa por aprovechar sus viviendas vacías

El rural de Monterrei, al igual que en el resto de Ourense, se enfrenta a la continua pérdida de población, fruto de la falta de industrias y oportunidades laborales en el medio, lo que provoca un paulatino envejecimiento de la población restante.

La otra gran problemática a la que se enfrenta es la falta de vivienda disponible, lo que impide a los ciudadanos que se quieren instalar en el rural, muchos de origen extranjero, acabar fijando su residencia y sumar habitantes, incluidos menores en edad escolar.

Con el objetivo de encontrar soluciones, ayer se celebró en Verín “Del derecho al techo hay mucho trecho”, una jornada sobre vivienda organizada por la Confederación de Centros de Desarrollo Rural (Coceder) y con la colaboración del Concello verinense y los CDR O Viso y Portas Abertas, y que reunió a responsables de organizaciones de ocho comunidades autónomas.

Puri Caldelas, concelleira de Desenvolvemento Rural, y Tamara Balboa, presidenta de Coceder y coordinadora de Portas Abertas, presentaron a los ponentes de las mesas redondas, cuyas conclusiones se plasmarán en un manifiesto.

Balboa recordó que el 40% de las casas en Verín están “baleiras”, una cifra que asciende al “76% en Laza, unha das tres maiores de Galicia, e probablemente do Estado”, una situación que achacó a la “multipropiedade, o deterioro e o medo dos propietarios ao aluguer”.

Bolsas de vivienda

En la primera mesa, sobre la situación actual de la vivienda en el medio rural, la presidenta y coordinadora de Provivienda en Galicia, Ana Pardo, afirmó que solo en el territorio gallego hay “506.370 viviendas vacías”, una de cada tres, “si bien no todas en condiciones de habitabilidad”.

Para dinamizar este parque, Pardo propuso la creación de bolsas que aporten “seguridad” a los propietarios, al garantizarles su organización, como avalista e intermediario, “el pago y el seguro”, una práctica que solo requiere de “recursos económicos y el compromiso de las administraciones”.

La experta de la USC Mª José Piñeira, incidió en la “dispersión” de la población gallega, repartida en muchos núcleos con pocos habitantes, y donde el acceso a la vivienda es un hándicap más para “un rural en proceso de despoblación”.

Plácido Lizancos, doctor aquitecto de la ETSAC, sostuvo que el problema del rural “es de todos”, y lo relacionó con las políticas “extractivistas que sufrió Galicia de sus recursos y fuerza laboral”, por lo que un joven verinense “seguramente acabe desarrollando su carrera profesional lejos de la villa”.

Custodia inmobiliaria

Después tuvo lugar un debate acerca de experiencias con alternativas de vivienda. Marc Fuster, arquitecto y facilitador del CDR La Safor, explicó la “custodia inmobiliaria”, con la que el propietario alquila y mantiene la titularidad, pero obtiene una revalorización al beneficiarse de rehabilitaciones sin coste.

En 16 años de mandato, Juan Luis Condón consiguió que Sediles (Zaragoza) pasara de 89 a 114 habitantes, comprando y rehabilitando inmuebles municipales, dotándolos de servicios y alquileres.

Condón criticó las trabas burocráticas: “El legislador debería adaptarse a la realidad, y no al revés, debería haber discriminación positiva hacia los pueblos”.