Frontera en Verín | Remite el bum del repostaje en la Raia al igualarse los precios

Elincremento de los precios del carburante ya ha afectado a la frontera con Portugal. Con una subida que no parece tener fin, los pueblos transfronterizos se ven afectados, quienes viven principalmente de consumidores portugueses. En el momento en el que se aplicó la bonificación de 20 céntimos por litro en España, las gasolineras de la Raia registraban colas kilométricas de vehículos portugueses. En cambio, desde hace un mes esa imagen ya no se vislumbra. Ahora, son pocos los que continúan llenando el depósito en España.

Es lo que ocurre en Feces de Abaixo (Verín), que aunque continúa con movimiento y flujo de vehículos de nacionalidad portuguesa, esta presencia se vio disminuida en gran medida. Este jueves el diésel estaba a 2,01 euros y la gasolina a 2,21 euros en la frontera española, mientras que del otro lado de la antigua aduana se encontraba el precio del diésel a 1,97 y la gasolina a 2,22 euros.

Son precios similares que con la bonificación que aplica el Gobierno nacional continúan siendo más baratos en España, aunque “cada vez a diferenza é menor, estanse igualando os prezos e hai menos clientes”, explica Juanjo Feijóo, gerente de la gasolinera de Feces. “Se non arranxan o tema dos 20 céntimos vémolo negro, o que fixeron en Portugal está mellor que o que fixeron aquí, alí baixaron directamente do imposto”, añade.

La bonificación de 20 céntimos española

A pesar de la crítica situación, el negocio continúa teniendo su clientela. “Vivo cerca de aquí, por iso veño, se vivira máis preto de Chaves iría alí”, cuenta el portugués Alfredo Silva, quien no está preocupado por la situación. En cambio, Paco Carniceiro continúa cruzando la frontera para llenar el depósito porque “segue sendo algo máis barato, e así aproveito para facer a compra aquí. Antes era moito mellor, pero agora tamén me sigue compensando, pouco, pero é algo”, afirmando que la diferencia ya es mínima.

Este jueves también hacían parada en la gasolinera de Feces una pareja de navarros que acudían a un festival en Portugal. “Llenamos depósito aquí porque nos han dicho que con la bonificación sale más barato que en Portugal”, aseguran Jaime Teijeira y Mirenchu Asín, quienes cogen el coche todos los días para ir a trabajar y se ven “muy afectados”. Y es que el descuento español de 20 céntimos por litro marca la diferencia entre España y Portugal. Por ello, muchos portugueses continúan acercándose a Feces: “Coa bonificación é máis barato, aínda así espero que a situación cambie, pero como veño sempre a Feces espero que cambie aquí, en Portugal non me inflúe”, explica la portuguesa Cristina Jorge en la gasolinera.

El daño llega al comercio

En cambio, no todos son conocedores de esta rebaja. Como explica Puri Regueiro, gerente del supermercado Covirán de Feces, “moitos non saben isto e o non reflexarse no cartel dos prezos pensan que é o que se lles vai cobrar, entón algún dá a volta sen repostar e coméntamo”. La vecina de Feces de Abaixo nota también desde hace un mes como se redujo la presencia de su clientela portuguesa: “Hai menos xente, menos afluencia de portugueses, é normal porque como non lles compensa tanto vir a encher o depósito, pois tampouco veñen a comprar, é algo lóxico”.

Más allá del precio del carburante, “todo -añade Regueiro- está subindo” y la cartera de portugueses y españoles lo nota. “E que xa non son os prezos, é que a xente anda menos en coche porque non o poden permitir, coller o coche será para privilexiados”, lamenta el gerente de la gasolinera. Con él concuerda Puri Regueiro, que no percibe grandes diferencias entre uno y el otro lado de la Raia, “porque agora o problema é xeral, a xente está moi mal de cartos, os salarios son moi baixos e non chega, é un círculo que non sei cando rematará”, concluye preocupada.