Diez ofertas compiten por las obras de la nueva estación intermodal de Ourense

La transformación de la estación intermodal de Ourense ya tiene pretendientes. El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) tiene ahora sobre la mesa diez ofertas diferentes para materializar el proyecto de la intermodal. Un total de 24 empresas aspiran a firmar el contrato que, por valor de 130,2 millones de euros, habilita una de las intervenciones más icónicas e importantes de la ciudad en los últimos tiempos.

El plazo para presentar ofertas se cerró este jueves a la una de la tarde. Según la información a la que pudo acceder este diario, la mayoría fueron enviadas por uniones temporales de empresas (UTE), aunque una compañía prefirió concurrir en solitario. Se trata principalmente de colaboraciones entre empresas de ámbito nacional y otras de ámbito local. Una de las alianzas con más bazas en el concurso es la de Copasa, empresa ourensana con amplia experiencia en obras de alta velocidad ferroviaria, que se postula junto al Grupo San José. Otra de las UTE en la carrera por este contrato está formada por Acciona y Extraco, esta última también ourensana. Además, suenan otros nombres, como los de Vias o Civis Global.

Preocupación

Fuentes empresariales consultadas por La Región señalaban cierta preocupación por el presupuesto manejado y los plazos de ejecución. Uno de los principales temores es la escasez de proveedores de piezas concretas propias del ámbito ferroviario, así como la inflación generalizada de materiales constructivos. Estos factores dispararon los presupuestos enviados por las empresas. De todos modos, y ante la posibilidad de que el contrato quede desierto, desde una de las empresas candidatas afirman que el presupuesto presentado es “defendible”.

La sociedad adjudicataria deberá asumir simultáneamente la ampliación del edificio de viajeros, la pasarela peatonal y el cubrimiento de las vías, entre otros. La justificación extendida a las empresas fue que “cada una de estas actuaciones están interconectadas entre sí y era complicado desligarlas”. El largo plazo de ejecución de seis años también preocupa, por lo que las fuentes consultadas ponen el foco en garantizar las partidas anuales establecidas para acometer la obra. A pesar de que el contrato es jugoso, estas complicaciones provocaron que algunas constructoras retirasen su candidatura.

Con la suerte ya echada, ahora solo queda esperar para saber quién hará realidad el proyecto de Norman Foster y Juan Carlos Cabanelas. La nueva intermodal es una versión adaptada del proyecto inicial de Foster, que ganó el concurso de Adif en 2011. Originalmente, el estudio del arquitecto británico planteaba edificar una estación de nueva planta sobre la playa de vías, con conexiones y jardines entre los barrios de A Ponte y O Vinteún. La principal traba era su coste, de más de 240 millones de euros.

En 2016, la Xunta, el Concello, el Gobierno y Adif firmaron un convenio que recortaba el proyecto de Foster y rebajaba ostensiblemente su presupuesto. De ahí salieron los planos para el actual proyecto, que estará finalizado, como pronto, a finales de 2029.