Herminia dejó escasas incidencias en Ourense y sigue este lunes afectando a la provincia

La borrasca Herminia dejó huella ayer a su paso por Galicia, con un reguero de incidencias, alrededor de 600 al cierre de esta edición, aunque solo una treintena de ellas en Ourense, la provincia con menor incidencia, aunque marcó rachas de viento de hasta 162 kilómetros por hora en Carballeda de Valdeorras.

La lluvia, persistente desde primera hora de la mañana, dejó más de 100 litros por metro cuadrado en las comarcas de Carballiño y A Baixa Limia, y acumulados de entre 30 y 60 litros en el resto de la provincia.

Para hoy, se mantiene toda la provincia en aviso amarillo por lluvia y viento, y en nivel naranja la montaña oriental, con aviso rojo en la costa gallega. Llegará la nieve, que a última hora de hoy lunes aparecerá en cotas relativamente bajas, incluso por debajo de los 700 metros. Mañana martes será una jornada de transición, antes de la llegada de otra profunda borrasca el miércoles.

Árboles caídos, un guardia civil herido, un reguero de accidentes, daños en algunas infraestructuras, cortes en las vías del tren, suspensión de vuelos y corte de carreteras fueron las principales incidencias que dejó la potente borrasca. Las autoridades prestan especial atención a los ríos, ya que el río Avia, en Ribadavia y Leiro, y el Támega, en Verín, estaban en prealerta por desbordamientos.

Según los datos del 112 Galicia, la mayoría de incidencias estuvieron relacionadas con la caída de árboles y ramas en las carreteras, que sumaron 277 casos, seguidas de 53 situaciones relacionadas con cables caídos, 43 objetos varios en las vías, 28 derrumbes y 82 intervenciones de los equipos de emergencias para evitar riesgos mayores.

La provincia más afectada fue A Coruña, donde se registraron 252 incidencias, seguida de Pontevedra con 216, Lugo con 96 y Ourense con 24.

En Ourense

En la provincia de Ourense, la principal incidencia se produjo en la salida de Celanova hacia Ramirás, donde una farola cayó sobre un coche. Aunque no se registraron heridos, fue necesario avisar a los agentes de la Policía Local, la Guardia Civil y los efectivos de Protección Civil. Además, hubo un accidente en Bande, en la OU-540, pero no hubo heridos.

Los árboles fueron los protagonistas. Así, debido a su desplome se produjeron cortes en la OU-0508 antes de llegar a Luíntra; en la OU-540, carretera que comunica Celanova con la frontera portuguesa, tanto en Verea como en Bande; en la carretera que une Alongos y Toén; en A Mezquita, o en la carretera que une Vilamaior y Castro Caldelas. En la ciudad, hubo ejemplares caídos en O Couto y los bomberos que actuar para desatascascar canalones en varios edificios.

También hubo afecciones en el suministro eléctrico. En la ciudad, vecino de O Pino estuvieron varias horas sin electricidad, al igual que en otros puntos de la provincia, como Entrimo o San Cibrao das Viñas.

Lo más destacado en la provincia fue la cancelación de prácticamente todos los eventos deportivos en el exterior. Se suspendieron todos los partidos de Tercera RFEF (el UD Ourense-Villalbés se canceló a petición del equipo visitante), y todos los partidos de Preferente. En Primera Futgal se jugaron solo 4 de los 10 partidos previstos y en Segunda y Tercera Futgal hubo varios partidos cancelados.

Resto de Galicia

El temporal obligó a cancelar vuelos en los tres aeropuertos gallegos, llegando a cerrar el de Peinador (Vigo); la A-52 tuvo problemas de tránsito por la caída de árboles a la altura de Ponteareas; la AP-9 estuvo cortada por esta misma circunstancia; y la línea ferroviaria de media distancia entre Coruña y Ferrol fue suspendida durante toda la jornada.-

En Vigo, se produjo el desprendimiento de las placas del tejado del Instituto Politécnico; en Salceda de Caselas (Pontevedra) voló parte de la cubierta de un edificio; en A Coruña, un árbol cayó sobre un coche en la AC-544 a en A Baña, en Carballo, parte de un andamio y del tejado de un edificio cayeron a la calle, causando daños en varios coches estacionados, en Cuntis ,se registraron inundaciones en varias calles, en Noia se desprendió la cubierta de la piscina municipal y en Santiago, hubo daños en coches por árboles caídos en el Campus.

Solo hubo que lamentar daños personales en la AP-9, a su paso por Vilaboa, donde un guardia civil que participaba en el operativo para reabrir la vía, al caerle un árbol de grandes dimensiones encima.