La pandemia impulsa el rural y más concellos que nunca ganan población
Demografía
El IGE certifica que 39 municipios ourensanos, casi todos pequeños, aumentaron los residentes entre enero y julio de 2020
El confinamiento domiciliario de marzo a mayo rompió la dinámica negativa histórica de muchos concellos y el bum demográfico que muchos alcaldes habían avanzado ya es una realidad que confirman las estadísticas. El Instituto Galego de Estatística (IGE) acaba de publicar las Cifras Oficiales de Población del primer semestre de 2020, un termómetro perfecto para medir la situación demográfica pre y post confinamiento. No son datos de padrón, sino de residentes reales.
Los datos no engañan. De los 92 concellos, hasta 39 consiguieron ganar habitantes. Es la cifra más alta de todo lo que ha transcurrido de siglo. Mucho más que los récords registrados hasta ahora. En 2004, eran 30 los municipios que crecían en habitantes, y en 2007, hasta 31. A partir de ahí, siempre hacia abajo.
Entre enero y julio de 2020, hasta 39 han registrado saldo positivo, gracias al trasvase desde ciudad y villas. El conjunto de la provincia siguió perdiendo habitantes (1.177 en seis meses), hasta 305.695.
El lastre de la vivienda
Muchos ourensanos convirtieron segundas residencias en primeras, otros dieron el paso de comprarse una en el rural. "Lo más negativo es que no hay suficiente vivienda para alquilar, ese es el gran lastre", lamenta Álvaro Vila, regidor de Taboadela, uno de los concellos que ha incrementado en mayor proporción su número de vecinos.
Atraídos por la cercanía a la ciudad y los polígonos, este municipio se convirtió en refugio perfecto. "En la pandemia se incrementó la recogida de basura un 40%", explica Vila. El municipio taboadelés ganó 40 residentes en solo seis meses y experimentó el mayor crecimiento de toda el área metropolitana, con casi un 3% de crecimiento.
También en el área, Luis Menor, alcalde de Pereiro de Aguiar, resalta que el crecimiento del primer semestre se acabó consolidando. "A finais de 2020 acabamos con 165 veciños máis que ao empezar o ano", relata. El suyo no es un caso paranormal, ya que es uno de los municipio que encadena años creciendo.
Sin embargo, hay otros que han conseguido doblegar la curva de la crisis demográfica por primera vez en mucho tiempo. Es el caso de Chandrexa, el que más creció de la provincia, con casi un 5% más de vecinos ,y que llevaba desde 2003 sin tener saldo positivo. También crecieron dos de los municipios clave de la Ribeira Sacra, A Teixeira y Parada de Sil, que acumulan ya dos años se crecimiento tras décadas de crisis. Entrimo, Petín y Lobeira completan el top 5 y regresan a la senda positiva tras años encadenando caídas.
Otro de los municipios que rompió tras años las dinámicas negativas es Verea, que ganó un 2% de vecinos en seis meses. El alcalde, José Antonio Pérez Valado, celebra la noticia, pero lamenta "o que custa". Y es que "se temos ata 57 altas no censo só crecemos un 2% significa que darlle a volta a isto custará moitísimo".
En el lado contrario, los que siempre subían, Allariz y Barbadás, cayeron en habitantes por primera vez en años. También la ciudad (perdió 270 habitantes, hasta 103.268) y las villas más pobladas: Carballiño, O Barco y Verín. Por último, Xinzo, Celanova y Ribadavia se salvan tras años de caídas.
Los alcaldes: “A fibra deu calidade de vida"
Maceda cerró el año con 83 nuevos residentes, según los datos que maneja el Concello. Rubén Quintas, el alcalde de la localidad, señala que "seis das familias son de concellos limítrofes". El éxodo, fundamentalmente desde Vilar de Barrio, Xunqueira de Espadanedo y Baños de Molgas, se debe a "os servizos primarios. Colexio, pavillón, hostelería...Todo está en Maceda". "Vanse abrir tres cafeterías novas. A pandemia obrigou a baixar os prezos dos alugueres e pode ser motivo para emprender", añade.
En Entrimo, la instalación de la fibra es uno de los motivos del crecimiento de población en plena pandemia. "É a mellor noticia que podiamos ter. Son matrimonios, algúns novos e con fillos. Coa fibra, moitos viron unha opción de ter calidade, aire libre e posibilidade de teletraballar", dice Ramón Alonso, alcalde de Entrimo.
La proximidad a la raia es uno de los motivos de crecimiento en Baltar. El regidor, José Antonio Feijóo, señala "a porta de Portugal como parte importante do e ambiente de xente nova que hai. No Couto Mixto abriron negocios e chegaron familias con nenos".
Aquilino Domínguez, alcalde de Parada de Sil, señala que "hai aldeas nas que se nota máis vida", pero la industria turística, el gran potencial de la zona, aún se resiente por la pandemia. "Hai sete ou oito explotacións gandeiras que se montaron este ano", dice con alegría el alcalde de Chandrexa de Queixa, Francisco Rodríguez.
Contenido patrocinado
También te puede interesar
PIERDE LA VIGENCIA DEL CARNET
Condenado por negarse a hacer la prueba de alcoholemia tras causar un accidente
ACCIDENTE DE TRÁFICO
Retenciones kilómetricas a la salida de Ourense
EL MACHISMO NO CESA
La violencia de género no da tregua: 2,4 denuncias al día en Ourense
Lo último
DENUNCIAS DE LOS LECTORES
Cronista local | Las denuncias de los vecinos de Ourense hoy, viernes, 26 de diciembre
FIN DE AÑO
San Silvestre en Piragua