Una plancha provocó el incendio en la vivienda de Curros Enríquez

Un incendio en pleno centro urbano, en la confluencia de las calles Curros Enríquez y Celso Emilio Ferreiro, provocó momentos de nerviosismo y preocupación no sólo entre el vecindario que vio salir las llamas por la ventana sino también entre los equipos de extinción que acudieron a sofocarlo. Y no precisamente porque la situación les sobrepasas sino por el hecho de que coincidió en un día con el parque de bomberos bajo mínimos (nueve personas cuando el retén normal consta de 13 o 14).

El intenso humo, que pronto dio paso a las llamas, fue detectado a las 16.00 horas y movilizó a ocho efectivos, todos menos al bombero que ayer le tocaba atender el teléfono. El incendio se declaró en un primer piso del número 34 de Curros Enríquez que equivale a una tercero porque hay dos entreplantas y un bajo. Según parece, se produjo un cortocircuito cuando la moradora, una mujer de avanzada edad, estaba planchando. No obstante, en el salón en donde se localizó el punto de ignición también había un brasero, según declararon testigos presenciales.

Los bomberos optaron por intervenir desde dos frentes con sendas líneas de agua: desde el exterior con ayuda de la autoescalera y desde el interior del inmueble, a través de la escalera del edificio. Precisamente, esta forma de afrontar las llamas hizo que el fuego fuera sofocado en menos de una hora. Asimismo, el personal que se movilizó desde el interior fue avisando a los vecinos que en ese momento estaban en sus casas -sólo en los pisos superiores- que no bajaran a la calle debido al humo concentrado en la escaleras. "Vimos que se trataba de un edificio moderno, con hormigón armado, y eso no pone en peligro la estructura ni favorece la rápida propagación", explicó Antonio Carbajo, quien ayer estaba al frente del operativo.

Los destrozo de las llamas , el humo, hollín y el agua utilizada durante las labores de extinción dejaron el piso inhabitable. Los mayores desperfectos se concentraron en el salón donde comenzó el fuego, la salita anexa y una habitación contigua. Además, el calor alcanzado durante el apogeo de la combustión rompió los cristales y derritió las persianas. Asimismo, hubo filtración de agua a la oficinas de las entreplantas.

En la extinción, fue clave, según Carbajo, el hecho de haber atacado el fuego desde dos frentes, decisión que obligó a intervenir a todos los bomberos del turno. "Si lo afrontas con una sola línea de agua, el peligro aumenta y el tiempo de extinción se duplica", explicó el mando.

El inicio de las vacaciones estivales para algunos unido a bajas médicas dejó un turno exiguo (el primer día de 2015 con tan pocos efectivos), por debajo del mínimo estipulado para esta ciudad (once bomberos) . Normalmente, hay dos turnos con 14 efectivos y otros tantos con 13. Esta situación, según los bomberos, compromete la seguridad ciudadana e incluso la de los propios efectivos de extinción por la presión con la que abordan cada situación.

Incendio Calle Curros Enríquez 1/2 from telemiño on Vimeo.

Incendio Calle Curros Enríquez 2/2 from telemiño on Vimeo.