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FINAL POR EL ASCENSO
El Celanova quiere hacer realidad el sueño que persigue desde hace 13 años, el regreso a Preferente. El conjunto de Ángel Mociño visita desde las 18:00 horas al Cordeiro pontevedrés con la idea de certificar al objetivo. Los del campo de San Rosendo llevan consigo una importante renta de dos goles lograda una semana atrás, que sin duda defenderá con uñas y dientes, sintiéndose respaldado por un importante número de aficionados que llegan en dos autobuses y coches particulares.
El cuadro local contará también con su gente, esperando darle la vuelta a esta eliminatoria que conducirá a uno de los dos hacia la Preferente Futgal.
Para los celanovenses no será sencillo aguantar el arreón inicial de los anfitriones y para eso debe mostrar “la máxima concentración y disciplina táctica”, algo que remarcó su entrenador en la última charla del pasado viernes antes de comenzar el entrenamiento.
Jesús Álvarez, técnico del Cordeiro, sabe que esta vuelta de la final es a todo o nada. “Es la última bala, por eso esta semana se buscó recuperar mentalmente a los jugadores e intentarlo hasta el final. Tampoco hay que darle muchas vueltas, porque en la ida no se hizo un partido tan malo como para corregir muchas cosas”.
Levantar dos goles no es imposible. “Esto es fútbol y hasta que el árbitro pite no está terminado para uno u otro. En el encuentro disputado allí vimos a un equipo joven con ganas, actitud y llevado en volandas por su afición, esperando que aquí sea la nuestra la que no lleve”, añade Álvarez.
El Cordeiro no variará su esquema de juego, “ya que sus goles fueron de un balón parado y el otro viene de un saque de portería, con error individual y no se volverá a repetir”.
En el caso de producirse una igualdad en el global de ambos partidos, se tendrá que jugar una prórroga y en caso de persistir la paridad, se decidirá el ascenso en la tanda de penaltis. “Lo único que valoramos ahora mismo es hacerlo bien en los 90 minutos y de ahí lo que pueda pasar”.
El entrenador cuenta con todos sus efectivos para recibir al Celanova, ya que ha recuperado a Samuel, que se había lesionado prematuramente durante el partido de ida y a Sergio y Nacho, que no participaron en San Rosendo.
El entrenador celanovense Ángel Mociño, que logró hace 13 años el que fue el último ascenso de los de San Rosendo a Preferente, asegura que “después de tanto tiempo es fantástico optar a poder disfrutar de este momento, con la masa social y con la gente comprometida con este grupo humano y deportivo. Es especial que en un sitio como Celanova se genere tanta ilusión y emoción”.
A pesar de la ventaja de la ida, Mociño avisa que “no tenemos nada hecho. Es cierto que partimos con un 2-0 y eso tiene que valer para ilusionarnos, motivarnos e ir con más confianza, creyendo en el trabajo que llevamos hecho, en nuestras capacidades y focalizándonos exclusivamente en lo que es fútbol, sin mirar hacia atrás. Sabemos que va a ser un partido muy duro, ya que ellos jugarán sus cartas. Además, no tienen nada que perder, porque llegan en desventaja. Tratarán de llevar el partido a su terreno, intentarán generar presión y nosotros debemos centrarnos en dar respuesta a esa presión desde la madurez”, finaliza el técnico de un Celanova que quiere saborear un ascenso.
Baño, 18:00 horas.
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