Álvaro García liquida al Arenteiro en Mérida (3-1)

El Arenteiro regresó de vacio de su visita al Romano José Fouto tras perder ante el Mérida por 3-1 en un partido que se torció nada más empezar y en el que los errores defensivos condenaron al equipo verde y encumbraron al delantero local Álvaro García, autor de los tres tantos para dejar los puntos en casa.

Las cosas no pudieron empezar peor para los intereses de los de Jesús Arribas, que ya llegaban mermados al choque por las ausencias del goleador Víctor Mingo y del que pone la creatividad en ataque, David Ferreiro. A los 20 segundos primer córner para los de Fran Beltrán y, a los 45, el 1-0. Tras el saque de esquina no está fina la defensa verde, Álvaro García cabecea mal, pero le cae la pelota entre las piernas y con la izquierda la manda al fondo de la red. El gol dejó tocado al Arenteiro que vio como Lancho remataba de cabeza fuera en el minuto 4 y como Diego García evitaba el segundo con una gran mano a disparo de Doncel.

Poco a poco se fueron reponiendo, y a los diez minutos pudo empatar Martín Ochoa que anduvo listo para meter la puntera ante la indecisión del meta local y Gaizka Martínez, pero se le marchó rozando el poste. El partido se niveló y la primera parte se consumió sin apenas ocasiones más que una para el local Doncel que detuvo Diego García o un remate arriba tras córner del verde Gorka Pérez.

Empezaron bien los ourensanos la segunda parte que pudieron empatar con un disparo de Martín Ochoa que evitó el defensa Javi Domínguez, y en la siguiente jugada llegó el 2-0 en el 53. Centro de Chiqui y remate de cabeza de Álvaro García. El fútbol es así de caprichoso. Tiraron de orgullo y en el 61 se metieron en el partido. Centro de Martín Ochoa y Diego Moreno, que llegaba solo, la mandó al fondo de la red. Pero en el 65 se volvieron a salir. Error garrafal de Bastida, que quiere ceder a Diego García y no aprecia que el omnipresente Álvaro García estaba antes. La cazó el goleador y no perdonó el 3-1. Fue el golpe definitivo y más cuando en el minuto 75 se quedaron con diez por la doble amarilla de Dani González. Quedaba mucho y más con los diez de añadido, pero no había ni piernas ni ideas y menos mal porque el Mérida tuvo tres contras para hacer el cuarto que habría sido demasiado castigo.