El Celta muestra su ambición en tierras inglesas

El Celta sigue creciendo y mejorando. Superó con un buen fútbol y ambición un comienzo en el que se vio sorprendido por la efectividad del voluntarioso Norwich en un amistoso en Inglaterra y logró igualar dos tantos de desventaja. Creó numerosas ocasiones, con dos palos incluidos, y mereció mucho más. Nolito y Krohn Delhi fueron los goleadores.

El equipo vigués arrancó con una presión muy adelantada y posesión pausada en las transiciones. La primera ocasión llegó a los cuatro minutos con una gran jugada de Santi Mina, quien se fue de varios contrarios en la frontal y lanzó de rosca con la izquierda muy cerca del palo derecho del meta local.

Sí acertó el Norwich a los seis minutos en un balón a la espalda de la defensa celeste hacia Lewis Grabban, quien, en posición muy dudosa, avanzó hacia Rubén y marcó (1-0). Tras un buen disparo de Álex López que atrapó bien el portero, Grabban, a los 12 minutos, volvió a marcar (2-0). Esta vez empujó el cuero en el área pequeña tras un centro desde la línea de fondo. Los locales habían acertado en sus dos llegadas a puerta.

El dominio del Celta era absoluto y las llegadas constantes. El empeño obtuvo sus frutos a los 27 minutos con un pase magistral de Krohn Dehli hacia Nolito, quien cruzó con precisión ante la salida de Ruddy (2-1). Dos minutos después, Larrivey remató al palo.

Ya en el tramo final, el Celta seguía apretando y sumando llegadas ante un rival completamente superado. A los 40 minutos Ruddy desvió un remate a bocajarro de Larrivey tras un buen pase de Nolito. Colección de llegadas celestes, con muy buen juego y una enorme ambición en la presión y en los metros finales

A los 43 minutos, golazo para un empate más que merecido, muy corto. Nolito cedió atrás y Krohn-Dehli enganchó un gran disparo desde del área para anotar un bello tanto (2-2). Un minuto después, genial pared entre Larrivey y Nolito y remate al palo del andaluz.

Tras el descanso, con cinco cambios en los celestes, no cambió la tendencia. El Celta dominaba, realizaba un buen juego y llegaba con frecuencia. El Celta brillaba, con velocidad de circulación, mucho juego al primer toque y movimientos constantes. Aunque tuvo ocasiones, no marcó. Buen ensayo.