La flota viguesa prueba el cebo ecológico y biocombustible con hígado de pescado

La Unión Europea (UE) quiere reformar la normativa comunitaria para el sector pesquero con la protección de los caladeros y de los recursos marinos como objetivo primordial. La flota viguesa de altura lleva años trabajando en este ámbito y en la actualidad está inmersa en numerosos proyectos.

Uno de ellos es el uso de biocombustible con aceite de pescado obtenido de hígado de ciertos escualos, como la quenlla. Está en fase experimental con varios barcos palangreros. “La finalidad es reducir el consumo de energías fósiles y preveemos un ahorro de entre un 5 y un 10 por ciento, con lo cual mejorarían las cuentas de resultados de las empresa. Además se eliminarían descartes y gases de efecto invernadero”, explica el presidente de la Cooperativa de Armadores de Vigo (Arvi), Javier Touza.

Esta iniciativa está financiada por el programa Incite, de la Xunta de Galicia, y en ella también está involucrada la Universidad de Vigo y el Instituto de Investigaciones Marinas.

Otro proyecto impulsado por Arvi es el uso de un cebo ecológico para la flota palangrera que faena en Gran Sol dirigida a la merluza.

Por otra parte, los barcos vigueses también están probando mallas grandes para evitar capturar peces inmaduros y redes selectivas para evitar descartes. “Quedarían fuera las especies de menor tamaño y las que no podemos pescar porque los aparejos y las redes tienen una forma específica lo cual repele ciertas especies”, apunta Touza.

respuesta a damanaki Estos proyectos son experimentales y se están probando a bordo de los buques. Todos están obteniendo resultados positivos, pero por el momento no se ven los efectos. “Los armadores no aprecian un efecto a corto plazo en sus cuentas de resultados, pero sí es cierto que con este tipo de acciones estamos mejorando la situación de los stocks en los caladeros y a largo plazo tendremos mejor calidad de productos”, explica el presidente de la Cooperativa de Armadores de Vigo.

Arvi pone así sobre la mesa el trabajo de la flota viguesa en favor de la sostenibilidad de los recursos marinos. “El futuro de los caladeros y las especies está en juego y nosotros contribuimos positivamente con este tipo de medidas”, apunta Touza, haciendo referencia a la propuesta de la comisaria europea Maria Damanaki con respecto a la reforma de la Política Pesquera Común (PPC).

La UE prevé recortar más las cuotas pesqueras, reducir las flotas y dar menos ayudas públicas al sector a partir del próximo año y se marca como objetivo primordial proteger los caladeros. “Nos parece bien esa protección, pero no a costa de desguazar más barcos y reducir la industria pesquera”, critica. Los armadores vigueses piden a la UE que se investigue el estado real de los recursos pesqueros antes de “poner en marcha la política del por si acaso” reduciendo cuotas.