La Festa da Androlla de Viana do Bolo se queda sin entradas en cinco horas

Cinco horas. Ese es el tiempo que han durado las más de 1.300 entradas de la LIII edición de la Festa da Androlla de Viana do Bolo.

El encuentro gastronómico tendrá lugar el Domingo de Entroido -2 de marzo-, conocido en el lugar como “Domingo Gordo”, tras el gran desfile de fuliones que se inicia sobre las 11:30 horas. Alrededor de 3.000 personas degustarán este manjar, ya que aparte de las entradas que se ponen a la venta, también participan los miembros de los diferentes fuliones.

Desde la entidad local se pusieron a la venta las entradas el pasado lunes y “volaron”. A un precio de 30 euros por comensal, el menú está elaborado a partir de consomé, lacón, androlla y chorizo con cachelos y grelos, cordero con ensalada, bica, café y chupito. Un auténtico festín gastronómico que pone en valor los productos propios de la localidad.

Esta iniciativa comenzaba en el año 1972 de la mano de “unos cuantos vianeses, no muchos” que se sentaron alrededor de la mesa para disfrutar del embutido por excelencia de la Tierra del Bibei: la androlla. Se trata de un producto cárnico elaborado a base de costilla de cerdo troceada, adobada, embutida en tripa natural y ahumada con leña en lareira tradicional.

Su fabricante principal se encuentra precisamente en el municipio vianés, la empresa García Marcos, un proyecto familiar que iniciaba su andadura hace más de tres décadas y que está íntimamente ligado a esta fiesta, ya que fue precisamente su fundador uno de los vecinos que formó parte de los primeros pasos de la Festa da Androlla.

Aunque la cuenta atrás ya ha comenzado, aún queda mucho Entroido que vivir en esta localidad del Macizo Central antes de sentarse a la mesa.