El Supremo manda al banquillo al fiscal general del Estado

GARCÍA ORTIZ

García Ortiz se convierte en el primer fiscal general procesado en la historia de la institución. La decisión se ha tomado por mayoría.

Publicado: 29 jul 2025 - 17:19 Actualizado: 29 jul 2025 - 17:53

El fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz
El fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz | Europa Press

El Tribunal Supremo ha confirmado el procesamiento del fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, por un delito de revelación de secretos vinculado al empresario Alberto González Amador, pareja de Isabel Díaz Ayuso. La Sala de Apelaciones ha rechazado el recurso presentado por García Ortiz contra la decisión del juez Ángel Hurtado de dictar auto de procedimiento abreviado. De esta manera, el Tribunal Supremo ha rechazado la que era su última oportunidad, el recurso que había presentado. La Sala de apelaciones considera que hay indicios suficientes para ese delito de procesamiento por revelación de secretos. Se entiende que el fiscal general habría sido quien filtró a la Cadena Ser un correo del abogado de González Amador que admitía que su cliente había cometido dos delitos contra la hacienda pública. La decisión se ha tomado con el voto en contra de uno de los tres jueces de la sala.

En cambio, el Supremo ha acordado por unanimidad el sobreseimiento y archivo de la causa para la fiscal jefa provincial del Madrid, Pilar Rodríguez, a la que Hurtado también había procesado. El Supremo considera que los indicios acumulados durante la instrucción son insuficientes para formular acusación.

El juicio contra el fiscal general se prevé que se celebre en los próximos meses y habrá que esperar si García Ortiz se sienta en el banquillo como fiscal general o presenta su dimisión antes. Hasta el momento, se ha mostrado contrario a dimitir.

La causa comenzó en octubre cuando el Supremo le abrió una causa por la supuesta filtración a los medios de un correo remitido el 2 de febrero de 2024 a la Fiscalía por el abogado de González Amador, quien en ese momento estaba imputado por fraude fiscal. En ese correo reconocía dos delitos cometidos y proponía un pacto para librarse de la cárcel.

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