José Manuel Lorenzo, más osado que valiente

PREMIO FORQUÉ

Pájaro libre con su productora DLO, José Manuel Lorenzo, artífice del audiovisual español donde los haya, conversa sobre su trayectoria y el Premio Forqué que acaba de recibir por Anatomía de un instante.

José Manuel Lorenzo afirma que "las cosas son imposibles hasta que se logran" | Juan Lázaro

Hace Tai Chi a diario, meditación cinco veces por semana, y desvela ciertas excentricidades con las temperaturas que levantan sonrisas y dibujan el perfil de un hombre hecho a sí mismo, con la autoestima de un triunfador, la humildad de un tipo que estudió con becas y vergüenzas las justas. «Yo, calcetines hasta para dormir», comenta. «Me pongo una bolsa de hielo en la mano izquierda cuando estoy en la sauna», revela.

José Manuel Lorenzo (Pontevedra, 1959), cabeza de DLO, productora que fundó en 2011, acaba de recoger el premio a Mejor Serie de Ficción en la 31ª edición de los Premios Forqué por Anatomía de un instante, basada en la novela de Javier Cercas sobre el intento de golpe de Estado del 23-F.

“Verdad que nunca fue fácil, ni lo fue en el pasado, ni lo es ahora”, reflexiona sobre el cambio que ha supuesto la aparición de las plataformas de streaming. José Manuel Lorenzo ha danzado lo suyo por el mundo, pero conserva su acento gallego. “Hace no mucho, cruzando el puente de Rande pensé, hay que volver, así que me compré una casa”, comparte. Una vez al mes visita en Pontevedra a su bendita y nonagenaria madre, “a este ritmo va a heredar ella de mí, no yo de ella”, comparte entre risas. Y sobre su otra jefa, la pintora y escultora Olga Andrino se deshace en elogios. “Ella es mucho más artista que yo... ay, los días que me quiere...”, suspira.

«Me ha hecho mucha ilusión», comenta con franqueza, agradeciendo el reconocimiento a Enrique Cerezo y al equipo que lo ha acompañado en el proyecto. La serie reconstruye el asalto de Antonio Tejero al Congreso y se centra en la actitud de Adolfo Suárez, Santiago Carrillo y Gutiérrez Mellado, que permanecieron sentados durante la irrupción armada. «Un escrito do diálogo, que hoxe en política se bota de menos», reflexiona.

Nunca fue fácil, ni lo fue en el pasado, ni lo es ahora

«Las cosas son imposibles hasta que se logran», cita a Nelson Mandela al hilo del reconocimiento y de su interés por la Transición, pensando en la generación de sus hijos. Elogia al guionista Rafa Cobos y al director Alberto Rodríguez, claves para convertir la idea en serie.

A lo largo de la entrevista reparte elogios a colaboradores habituales como Agustín Martínez o el compositor Lucas Vidal, y repasa una trayectoria que va de la ingeniería industrial al cine y la televisión, pasando por TVE, Mediaset, Antena 3, Canal+ y Sogecable, además de proyectos como Boomerang TV o Drive. «Hoy tengo DLO, una productora boutique con la que hago solo lo que me gusta», afirma, reivindicando la pasión y el olfato creativo como señas de identidad.

Reconoce no dormir bien por estar siempre ideando proyectos y reflexiona sobre el cambio que han traído las plataformas de streaming a la industria. Mantiene su acento gallego, ha vuelto a Pontevedra, visita a su madre nonagenaria y se deshace en elogios hacia su pareja, la artista Olga Andrino.

Con espíritu zen, inquieto y agradecido, Lorenzo concluye con una definición muy suya: «He sido osado, que no valiente», una frase que resume su trayectoria, su carácter y su manera de estar en el mundo.