Buenos Aires: Montiel Espectáculos rindió tributo a Pedrito Rico

Liliana Montiel nos convoca para recordar a Pedrito Rico en un lugar emblemático de Buenos Aires. La magia comienza al llegar a "La Botíca del Angel", un lugar fantástico que atesora recuerdos de años y años, homenajeando a figuras señeras de la cultura argentina.

Eduardo Bergara Leumann legó el Museo a la Universidad del Salvador. En la web de la USAL leemos información que compartimos: "La Botica del Ángel es un collage escenográfico creado por Eduardo Bergara Leumann en el museo que fue su casa, donde sorprenden obras de arte de muchos artistas plásticos: Raúl Soldi, Antonio Berni, Luis Felipe Noé, Marta Minujin, Guillermo Roux, Juan Carlos Castagnino, Carlos Gorriarena, Josefina Robirosa, Héctor Borla, Juan Carlos Benítez, Eduardo Pla, Raúl Lozza; manuscritos de Jorge Luis Borges, Ernesto Sábato, Manuel Mujica Lainez. Recuerdos de actores y cantantes, algunos de los cuales debutaron en La Botica como Susana Rinaldi, Marikena Monti, Nacha Guevara, Leonardo Favio, entre otros.

En el recorrido por el lugar se encuentran homenajes a compositores de tango y folklore como Astor Piazzolla, Mariano Mores, Homero Expósito, Mercedes Sosa, Ariel Ramírez, María Elena Walsh, entre otros, y también se pueden apreciar las instalaciones armadas con fotografías y objetos históricos de un Buenos Aires que se fue perdiendo".

Liliana Montiel es reconocida por la importancia de su labor como directora de los coros del Centro Salamanca, Centro Zamorano y Centro Cultural del Partido de La Estrada, entre otros. Fue distinguida con la Medalla de Hispanidad que otorga la Federación de Sociedades Españolas de la Argentina, por su vasta trayectoria dentro de la colectividad. Ella nos habla sobre el espectáculo que dirige, "Donde la música nos lleve". Fue pensado - como lo dice su título - para dejarnos llevar por los caminos que ella nos hace transitar a veces sin darnos cuenta, ya que una música te puede transportar y hacer disfrutar de algun lugar o momento de tu vida cercano o muy lejano. Con la calidez de Rocío del Cielo y Claudio Villafañe recorrimos distintos generos musicales".

Le preguntamos cuando surge la idea de realizar este espectáculo, un nuevo logro de Montiel Espectáculos: "Homenajear a Pedrito Rico era uno de los deseos que queríamos cumplir desde hace mucho tiempo. Al cumplirse, el 21 de junio, treinta y cinco años de la partida del Angel de España, decidimos que era el momento justo, aquí, en la Botica del Angel, a sólo dos días de la fecha. Pedrito Rico merece un gran homenaje; asi lo hablamos con la presidente de su club de fans en Argentina, Marta Amendola. Esto fue solo una introducción para lo que vendrá: recordarlo y homenajearlo como se merece, con esa dulzura y delicadeza que lo caracterizaban. Creo que todos estamos en deuda con este gran artista; a él - al igual que a Miguel de Molina y otros tantos -, le sucedió que en ese momento el público quizás no llegaba a entender su estilo, su maravilloso arte. El nos ha dejado el legado de sus canciones y su estilo tan particular - lo vemos en sus floridos, tan distintos de los floridos andaluces -; el tenía su propio estilo, tan a su aire".

En La Botica, reciben con un café de marca asturiana que se degusta mientras se recorren los salones. Ya ubicados en el museo, agradablemente calefaccionado en una noche fresca, comienza el espectáculo. José Luis Larrauri - quien, al igual que Yolanda Acuña, fue elegido por Bergara Leumann para preservar su legado - habla de la botica, de sus comienzos como sastrería y de la improvisada actuación de quienes asistían a la inauguración, surgiendo así el espacio que tanta importancia tuvo y sigue teniendo.

El Ensamble de Castañuelas que dirige Liliana Montiel nos hace soñar con paisajes bellos; tan diestramente ejecutadas, las melodías nos sugieren historias misteriosas. Ataviada con un sombrero del valenciano, Rocío del Cielo le rinde su tributo. Y recuerda: "En mi vida, Pedrito es muy especial; es volver al lugar más maravilloso que uno puede habitar, es retrotraerme al vientre de mi madre que fue el primer lugar donde lo oí. La voz de Pedrito siempre estuvo presente en mi vida; en mi infancia, se lo nombraba con tanta naturalidad como si fuese un familiar cercano".

Evoca una jornada que la marcó: "Hay un momento que siempre está muy presente; con dos años me llevaron al Teatro Astral a verlo, en primera fila como siempre, y recuerdo que al comenzar el espectáculo me deslumbraron los brillos, el impacto de las luces sobre sus trajes bordados, sus capas, sus chaquetas. De ese día, atesoro una foto en el camarín.

Su figura, su presencia son inolvidables; con el correr de los años pude conocer y admirar su obra más en profundidad, ya que cuando él partió yo tenía tan solo tres años y su recuerdo permanece intacto en mi corazón.

Por eso fue una emoción muy grande cuando mi querida Marta Améndola me regaló el honor de cantar su pasodoble "Fuiste el ángel" dedicado a su persona. A quien agradezco profundamente con todo mi corazón y ella sabe que aquí tiene una servidora para llevar siempre por bandera el recuerdo de quien fue un grande en todo sentido el inolvidable Angel de España, Don Pedrito Rico".

También para Claudio Villafañe fue una noche importantísima: "Donde la Musica nos lleve' presentado por Montiel Espectáculos en La Botica del Angel, donde se rindió un tributo a Pedrito Rico, fue un momento que no olvidaré. Compartir escenario con Rocio del Cielo es un privilegio, hemos transitado un viaje musical que nos sumergió en el género español y argentino, creando un clima único lleno de pasión, alegria y nostalgia.

Cada canción elegida fue emotiva, despertando una profunda admiración por la riqueza cultural de ambos países.

Un placer, haber sido convocada por Liliana Montiel y compartir la noche con Las Sultanas, María De Palma, Florentino Bahamonde, Rocío Giménez y el pintoresco Ensamble de Castañuelas del Centro Salamanca de Buenos Aires".

Excelentes, Las Sultanas, siempre con su gran conocimiento de las danzas españolas de distintas regiones, con su gracia y simpatía. Además de ser prestigiosas bailarinas, transmiten su saber: Mabel Ricci, en el Centro Gallego de Avellaneda y Mariana Fernández, en el Centro Riojano Español de Buenos Aires.

Muy aplaudidos, Rocío Giménez y Florentino Bahamonde deslumbraron con la danza, los bombos y las boleadoras. Un lujo más de la velada.

La actriz y directora de teatro María De Palma manifestó: "Ha sido un placer para mi haber sido invitada a participar en el tributo al inolvidable Angel de España, Pedrito Rico, recitando dos poesias de la Sra. Marta Amendola". "Recibir en nuestras almas la caricia de emotivos momentos como el que tuve el privilegio de vivir, cordialmente invitada, por la Sra. Liliana Montiel, no es algo que muchos puedan vivir, y más aún si se encontraba presente la autora de las poesías que recité, bien sabemos que esa circunstancia aumenta la responsabilidad en la interpretacion de los textos".

Uno de los poemas recitados fue Te recuerdo:

No hay perfume de claveles Ni guitarras para el canto Ni mi voz en un poema Todo es tristeza y es llanto. Marcaste con tu presencia Una huella de hidalguía Una marca indeleble Fuiste estrella, fuiste guía. Único como artista Canto, baile y alegría Salero, garbo y gracia Cual rey de la gitanería. Como hombre te recuerdo Cálido, tierno y gentil Con todas esas virtudes Que se te puedan pedir. Tu recuerdo es imborrable Por más que pasen los años Permaneces siempre vivo Y yo por siempre te extraño

Comenta la autora, Marta Améndola, presidente de su club de fans y amiga personal del español: "Para todos Pedrito Rico fue ese alicantino de voz melodiosa que conquistó al público con sus dotes de cantante y bailarín, su gracia, duende y carisma. Para mí fue ese ser que me cautivó primero como artista singular pero en el que, al conocerlo, pude descubrir a un ser humano de grandes valores, como hijo, hermano, amigo, compañero, un hombre íntegro que a pesar de haber obtenido el reconocimiento del público, prensa y sus pares y logrado premios y distinciones supo conservar siempre la humildad. Fue un ser mágico, un regalo especial en mi vida que adquirió colores gracias a él".

Finalmente, Liliana Montiel expresa un deseo: Siempre es un placer para mí trabajar con artistas queridos como lo son Rocio del Cielo, Claudio Villafañe, Las Sultanas, María De Palma, Rocío Gimenez, Florentino Bahamonde, y en esta oportunidad también la alegría del Ensamble de Castañuelas. Ojalá sigamos siempre marcando el camino de esta cultura aquí, en Argentina, con España por bandera".

Sin duda, seguiran marcando ese camino tan preciado, en las instituciones españolas, en la Avenida de Mayo, en el Centro Naval. Donde se presenten, serán siempre elogiados y aplaudidos; es el reconocimiento de los amantes del arte español, del que disfrutan día a día.

María González Rouco

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