La emigración de los jóvenes españoles es protagonista en el Festival de Cine de Toulouse

El problema de los jóvenes para salir adelante en tiempos de crisis, que plantea el film de Jaime Rosales "Hermosa juventud", protagonizado por los debutantes Ingrid García-Jonsson y Carlos Rodríguez, encendió un vivo debate tras su proyección hoy en el festival Cinespaña de Toulouse.

"Soy actriz, pero vivo con 400 euros que gano trabajando como camarera. En mi profesión hay más de un 80 % de jóvenes en el paro. No es que la realidad que muestra no sea esperanzadora, es que tenemos pocas esperanzas", dijo García-Jonsson en respuesta a una espectadora que censuró a Rosales su visión catastrofista de la juventud europea.

"Retrata un problema que hay en España, muchos jóvenes no ven por dónde salir, pero no sé si es un mensaje pesimista", argumentó Rodríguez en una entrevista con Efe, a lo que García-Jonsson agregó que era el punto de vista de Rosales: "Si hubiera cortado la película cinco minutos antes, no acabaríamos con esa sensación de desazón".

Los políticos, añadió la actriz a Efe, "se esmeran en dar una imagen de España que no es la real; creo que "Hermosa juventud" se esfuerza por mostrar esa parte de la realidad que es real (...) Además -advirtió-, me gusta que se dé voz a gente que normalmente no tiene cabida en las películas".

"Hermosa juventud" es un crudo retrato de la vida de dos jóvenes sin preparación académica desde el momento en el que ella sabe que está embarazada; la falta de oportunidades y la decisión de tener a su hijo sitúa a la pareja en un callejón sin salida, que les lleva a emigrar.

Ambos jóvenes visitaron la ciudad francesa por primera vez en representación del director, que llegará el sábado próximo a Cinespaña. Un certamen que Jaime Rosales ya ganó en 2007 con "La soledad", la cual también le proporcionó el Goya aquel mismo año.

Rosales aprovecha al límite la naturalidad de sus actores, hasta el punto de que apenas ensayan y les da mucha libertad para improvisar, explicaron los jóvenes, admiradores ambos de Alberto Rodríguez y Daniel Monzón, si bien García-Jonsson añadió a Alejandro Amenábar, Carlos Vermut y François Ozon entre sus preferidos.

Este es el primer papel protagonista de García-Jonsson, nacida en Suecia, hija de sueca y rubia de ojos azules -"pero yo soy de Sevilla, ¿eh?", apunta con gracia andaluza-, y también el de Carlos Rodríguez, ambos con una larga lista de pequeños papeles en series de televisión y cortos.

Para Rodríguez, un "chico de barrio" madrileño y forofo del Real Madrid, aunque en la cinta finge "colchonerismo", trabajar con Rosales ha sido una oportunidad única desde el punto de vista profesional, si bien comprende que no es un cine "fácil" ni "comercial" que pueda abrirle otras puertas de inmediato.

Por el momento, tendrá "paciencia" y seguirá esperando, para no ser un actor más en el paro.