La Legislatura de Buenos Aires aprueba la restitución histórica que garantiza al Deportivo Español el uso de sus terrenos durante 20 años

La Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires aprobó de forma definitiva la Ley de Restitución Histórica que permitirá al Club Social, Deportivo y Cultural Español mantener el uso de los terrenos situado entre las avenidas Santiago de Compostela, Asturias y Castañares durante los próximos veinte años. La medida, largamente reclamada por la institución y por la colectividad española en Argentina, supone un paso clave para la continuidad del proyecto social y deportivo que el club desarrolla en el barrio del Bajo Flores.

El texto, impulsado por la diputada porteña y socia del club, María Sol Méndez, superó el procedimiento de doble lectura y la Audiencia Pública, y fue aprobado en una sesión que congregó a decenas de hinchas y representantes de la colectividad. "Vamos a llevar a lo más alto al Deportivo Español y volver a hacerlo grande. Este logro es de todos los socios y socias", celebró Méndez, recibida con aplausos por los asistentes.

La sanción definitiva llega un año después de que la diputada presentara el proyecto que reclamaba la restitución de la totalidad de los terrenos históricos del club, ocupados desde hace más de medio siglo. En aquel acto, que llenó por completo el salón de la Legislatura, Méndez prometió que no abandonaría su escaño sin lograr la recuperación del predio: “Aunque nos crean muertos, cuando nos unimos, la colectividad española es invencible”.

El presidente del Deportivo Español, Diego Martín Elías, volvió a subrayar la deuda histórica con la entidad. “Somos el único club que perdió sus tierras habiéndolas pagado. No pedimos privilegios, pedimos que se reconozca el esfuerzo de generaciones que construyeron este club desde la nada”, afirmó.

La aprobación de la ley contó con el respaldo de numerosas personalidades y entidades, entre ellas el embajador de España en Argentina, Joaquín María de Arístegui Laborde; el expresidente argentino Ramón Puerta; el exembajador Ricardo Alfonsín; representantes de la AFA y de más de cincuenta instituciones de la colectividad española. Arístegui definió al Deportivo Español como “una institución social imprescindible y un pilar del legado español en Argentina”, y defendió “una solución justa que reconozca su historia y su papel actual”.

Fundado en 1956 por emigrantes españoles, el Deportivo Español llegó a concentrar más de 25.000 socios y fue durante décadas un motor social del sur porteño. Urbanizó terrenos entonces anegadizos, levantó instalaciones deportivas y ofreció servicios básicos en una zona donde la presencia del Estado era escasa. En 1981 inauguró su estadio, con capacidad para 35.000 personas. Sin embargo, una profunda crisis institucional obligó a cerrar sus puertas en 2003.

En 2007, la Ciudad restituyó el predio, pero un año más tarde una nueva administración autorizó la instalación de la Escuela de Policía Metropolitana en gran parte del terreno, reduciendo el uso del club a siete hectáreas bajo un comodato ya vencido. La nueva ley garantiza ahora estabilidad jurídica y la posibilidad de planificar el futuro a largo plazo.

La aprobación fue celebrada como un triunfo histórico por socios, vecinos y dirigentes, que reivindican la medida como un acto de justicia largamente esperado. Para la colectividad española en Buenos Aires, el mensaje es claro: el Deportivo Español no se va; el Deportivo Español renace.