El Supremo de Estados Unidos duda sobre los aranceles de Trump

El Tribunal Supremo de Estados Unidos ha comenzado ya su deliberación sobre la potestad del presidente para imponer aranceles a terceros países por la vía de emergencia, es decir, sin pasar por el Congreso; una cuestión a la cual Donald Trump ha recurrido en numerosas ocasiones y sobre la cual ha hecho pivotar buena parte de su política exterior, con gravámenes de entre el 10 y el 50% a las importaciones de más de un centenar de países.

Es por ello que el propio Trump llegó a subrayar que la decisión de estos nueve magistrados es "una de las más importantes de la historia" de su país, pues su implicación es enorme tanto a nivel económico como político. En juego están unos 200.000 millones de dólares anuales de aranceles y, como telón de fondo, la capacidad del presidente para tomar decisiones amparándose en una ley de 1977 que confiere a los mandatarios una autoridad excepcional cuando se considere que actúa regido por la emergencia.

Pero, a pesar de la trascendencia que el propio Donald Trump ha conferido a la audiencia de hoy, se ha mantenido en su decisión de no acudir a esta primera sesión; algo que harán en la segunda las dos pequeñas empresas que iniciaron el procedimiento, a las que se han unido otras entidades y varios estados en manos de los demócratas.

Su principal argumento es que la citada ley de poderes de emergencia no menciona explícitamente los aranceles como una de las prerrogativas del presidente, a pesar de que sí recoge una disposición sobre la autoridad para regular las importaciones a la hora de afrontar una crisis. Se espera que antes de que concluya este año se produzca un pronunciamiento del Tribunal Supremo, conformado por seis magistrados conservadores y tres liberales.