La Yamaha R7 llega para marcar un cambio

Yamaha es una marca nacida para la competición. Los japoneses son conscientes de la esencia deportiva de su emblema y con la gama R han sabido entender las necesidades y deseos de sus clientes, fieles casi siempre durante años.

La firma de Iwata ha querido cerrar el círculo R con la puesta en el mercado de la nueva R7, una motocicleta con nada menos que 76,4 caballos en un motor bicilíndrico y un peso de apenas 188 kilogramos con el depósito lleno.

¿Qué pretende Yamaha con este modelo? Atraer y captar la atención de los clientes que quieran entrar en el sector de las motocicletas de carretera deportivas sin tener que elegir entre un motor de una potencia al más puro estilo competición o uno que les deje con ganas de más.

En el aspecto estético, la nueva R7 sigue el camino marcado por sus hermanas, con un diseño agresivo de líneas rectas y morro afilado. Los acabados bitono le aportan una seña de identidad diferenciadora con respecto a modelos de otras marcas y el display digital demuestra el avance tecnológico del sector.

Para detener a esta pequeña fiera la Yamaha R7 incorpora frenos de cuatro pistones en el eje delantero, más que suficiente para detener el vehículo en pocos metros. El sistema de embrague es anti-rebote y la gestión de la electrónica es nueva, con unos colectores de admisión mejorados que aumentan la eficiencia del conjunto.

Además de la versión esta motorización, también se podrá adquirir en un modo más 'light' para aquellos que solamente dispongan del carnet A2 de moto.

En cuanto a la fecha de comercialización, tocará esperar a que pase el verano. Yamaha estima que las primeras unidades llegarán a España en el mes de octubre. El precio se publicará en las próximas semanas.