O Barco ya logró la relación de puestos de trabajo propia

Los concejales del grupo socialista de O Barco lograron sacar adelante en solitario su respaldo al informe jurídico en el que los técnicos municipales desestiman los recursos potestativos de reposición formulados contra la relación de puestos de trabajo (RPT). El acuerdo, que afecta a aproximadamente 40 funcionarios y 90 laborales del Concello fue validado por el PSdeG-PSOE con la abstención de los grupos popular y nacionalista, en la oposición municipal, unos 16 años después de la redacción del primer borrador, según puntualizó el portavoz del PP, Antonio Melo García. El rechazo de las alegaciones salió adelante con los ocho votos del grupo de gobierno y las siete abstenciones de la oposición: cinco del PP y dos del BNG.

La RPT es un documento que regula las características de los distintos puestos de trabajo de los empleados del Concello. Establece los requisitos que precisa cada puesto y sus principales características, además de las retribuciones complementarias.

El largo tiempo empleado en la negociación de la RPT fue puesto sobre la mesa por el portavoz del grupo popular, Antonio Melo García, quien indicó que el primer borrador databa de 2009, una circunstancia que confirmaría la teniente de alcalde, Margarida Pizcueta Barreiro. El concejal del PP consideró excesivo el tiempo transcurrido para su aprobación. “En un documento que es fundamental para el Concello debemos ser más ágiles”, expuso en su breve intervención. El alcalde socialista, Aurentino Alonso Araujo, respondió que el proceso negociador definitivo comenzó en 2017 sin lograr llegar a un acuerdo.

Documento complejo

A su vez, el portavoz del BNG, Manuel Agra Villar expuso la complejidad que entraña un documento como la RPT. “Por un lado, é un sistema no que todo está interrelacionado e por iso as reivindicacións individuais son difíciles de encaixar sen desmontar todo. É difícil conxugar a necesidade dun sistema obxectivo coherente como é unha RPT coa percepción humana que pode ter unha persoa de cómo se valora o seu traballo e esforzo. Créase unha tensión irresoluble: a potestade de autoorganización da Administración cos dereitos individuais e humanos”. Este argumento fue el que utilizó para justificar la abstención de su grupo.

Desde el grupo socialista, su portavoz, Margarida Pizcueta, recordó que la RPT había recibido el visto bueno en octubre, siendo presentados seis recursos posteriormente. Finalizó destacando la existencia de “un informe xurídico rexeitando cada un dos recursos”. Antes de la votación intervino el alcalde, Aurentino Alonso, quien insistió en que hubo “moitísimas negociacións” y que la RPT “foi moi negociada”. Además, se quejó de que los trabajadores presentasen los recursos sin haberlos llevado previamente a la mesa de negociación con los sindicatos representados: CIG, UGT y CC.OO.

Recursos

El portavoz nacionalista, Manuel Agra, aludió a los recursos presentados, destacando entre ellos la falta de motivación en el rechazo de las alegaciones, la caducidad del expediente de la RPT o la reclamación de una mayor puntuación en algunos casos, como para la peligrosidad, la discriminación retributiva de los oficiales o la ausencia de una valoración de la incompatibilidad.

El concejal del BNG también se refirió al informe jurídico que los rechaza, exponiendo argumentos como que una respuesta individualizada es innecesaria o que las diferencias salariales, demandar más puntos o valorar los correspondientes a la peligrosidad deben determinarlos los técnicos de las administraciones, y que la incompatibilidad aparece valorada en un marcador o casillero.

Durante la larga negociación de la RPT no faltaron las movilizaciones, como varias concentraciones que se desarrollaron en la Praza do Concello, ante el Edificio Multiusos que alberga las dependencias municipales de O Barco de Valdeorras.