Se arriesga a una condena por negar en el juicio que su marido la maltrató

Farid K.A. pudo reducir la condena interesada por el fiscal en su escrito de calificación provisional, pero desechó la opción de una sentencia de conformidad. Insistió antes, durante y después del juicio en el Penal 1 que no agredió a su mujer. Siguen juntos y “ahora sin problemas”, explicó el inculpado en un castellano con frases sencillas y cortas.

El acusado negó amenazas de muerte a la madre de sus cuatro hijos mientras le retorcía la muñeca y le pegaba, todo ello en presencia de los dos niños más pequeños. Tampoco negó el amago de agresión con una silla que evitaron los menores, según la acusación pública.

Solo admitió una riña verbal el 22 de agosto de 2023, a las ocho y media de la mañana en su vivienda de O Barco, porque ella no quiso darle el dinero que tenía de su mano para unas futuras vacaciones en Marruecos. “Discutimos un poco, nada más” -destacó Farid- “porque yo quería llevar el dinero al banco”. Según esa versión, la sujetó por la muñeca porque ella le arañó antes. Y ya puestos a responsabilizar a la víctima, aseguró que sufría un ataque de celos porque creía que se veía con otra mujer.

Esta última llamó por teléfono a la Guardia Civil y la Policía Local la condujo al hospital. En un primer momento, no quiso declarar en el juzgado, pero finalmente sí lo hizo.

La jueza que dictará la sentencia le aclaró este lunes que podía acogerse a la dispensa de no declarar contra su marido porque en el Juzgado de O Barco no se la advirtió de que si testificaba allí estaba obligada después a hacerlo en la vista oral. Aun así, este lunes quiso hablar para exonerar a su marido. “Discutimos, pero no me pegó; me sujetó por la muñeca para cogerme el móvil y que no llamase ”, explicó.

También negó los arañazos que su marido le atribuye y que creyese en ese instante que el dinero que le requería fuese para otra mujer. Todo lo contrario a lo que dijo en el juzgado. Ante esta tesitura, la magistrada le advirtió, al concluir su comparecencia, que decidirá en sentencia si manda deducir testimonio para que la Fiscalía la acuse por falso testimonio. Minutos antes había prometido que diría toda la verdad.

Los dos agentes de la Guardia Civil que la socorrieron declararon que la mujer sí les confesó que había sido agredida. La forense que la examinó confirmó que la víctima presentaba una lesión en la muñeca, pero no objetivó golpes en la cabeza y piernas tal como dijo en el juzgado.

Fiscal: dos años de cárcel

El fiscal pidió una condena de dos años de cárcel y seis de alejamiento, con una distancia de 200 metros, por dos delitos: amenazas y maltrato físico del artículo 153.1. (lesión leve) del Código Penal. “Ese artículo no castiga por pegar poco o mucho sino al hombre que utiliza la fuerza física para imponer su voluntad”, aseguró el fiscal Mario Brualla.

Defensa: “No hubo dolo”

El abogado de la defensa argumentó que no hubo dolo en la acción de Farid, y que se trata de una lesión fortuita en un intento de que ella no siguiera arañándolo. Destacó que la declaración incriminatoria de la perjudicada no es persistente (cambios de versión) e incluso aludió a sus dificultades con el idioma en 2023, cuando compareció en el juzgado. A su entender, la mujer “tenía motivos espurios para denunciar, ya que creía que había otra mujer en la vida de su marido”.