Su negativa a acudir al colegio acaba con sus padres juzgados en Ourense

El alto absentismo escolar de su hija durante el curso 2022/23 -más de un 85%- y parte del 23/24 llevó este martes a Miguel G.J. y a Miriam J.C al banquillo del Penal 2 de Ourense. El acusado no declaró, pero sí lo hizo su mujer, quien atribuyó las faltas a la negativa de su hija de ir al colegio. “Empezaba a llorar, la subía al autobús y la bajaban, por lo que incluso la llevábamos en coche al colegio para no meterla en el transporte escolar y tras dejarla allí me llamaba el profesor para decirme que se encontraba mal”, explicó.

La acusada señaló que le preguntó varias veces a su hija qué le pasaba, pero nunca le contaba nada y se ponía a llorar e incluso a vomitar. “La llevé al médico y me dijeron que me iban a derivar a un psicólogo, pero nunca lo hicieron”, lamentó, incidiendo en que ella se esforzó porque la menor fuese a clases. “No había manera”, recalcó. Al respecto, señaló que su hija es poco sociable y cree que se pudo sentir sola en un momento dado.

Además, apuntó que tiene dos hijos más y que con ellos nunca hubo ninguna incidencia de este tipo. “El colegio sabe que jamás tuve problemas en esto, que solo me pasó con esta niña. Uno me salió graduado ya del centro”, afirmó.

“Hicieron todo lo posible”

Además de la madre tambien testificaron otros tres testigos para arrojar luz sobre las causas por las que la menor no iba al colegio. Una de las declarantes, trabajadora social de profesión, indicó que la niña se negaba a ir y no le consta que el absentismo escolar fuese causado por la desidia de sus padres. “El mayor está cursando la FP sin mayor complicación, el pequeño acude al colegio y además tuvo problemas en la piel y los padres siempre cumplieron”, aseguró.

Manifestó una opinión similar sobre la situación juzgada una miembro del equipo técnico de menores. “Hicieron, dentro de lo que ellos son capaces de hacer, lo posible”, señaló en referencia a los padres. Tampoco detectó una desidia por parte de los acusados que explique el absentismo escolar de la menor. En este sentido, señaló que siempre que citaron a los padres, estos siempre acudieron. Por su parte, el tutor indicó que una gran parte de las faltas se justificaron.

La Fiscalía solicita en su escrito que se imponga a ambos acusados la pena de 10 meses de multa a razón de 9 euros diarios (2.700 euros) por un delito de abandono de familia. por incumplir los deberes legales de asistencia inherentes a la patria potestad. Por su parte, el abogado de la defensa interesó la libre absolución para sus dos clientes.