La nueva generación de los talleres ourensanos

El sector del automóvil se encuentra sumido en un momento de cambio. La llegada de nuevos modelos genera un efecto dominó en toda la cadena relacionada con la automoción, que debe conocer y saber tratar los nuevos tipos de motor y los nuevos perfiles de clientes que lo conducen.

Este cambio ha llegado, además, con los talleres de Ourense sumidos en una batalla por el relevo generacional, lo cual ha llevado a la Asociación Provincial de Talleres de Reparación (Atave) a poner en marcha una serie de formaciones propias que permitan, por una parte, que sus socios refresquen conocimientos y, por otro, abrir su mundo profesional a jóvenes y mayores que buscan empleo tras una primera experiencia profesional que no dio frutos.

Perfiles variados

“El sector está en un momento de cambio muy complicado”, explica el presidente de Atave, Ricardo Borrajo, “sobre todo, porque nadie tiene claro cuál es el camino a seguir”. Entre los problemas que afectan al mercado del automóvil, Borrajo considera que “está cambiando todo, están cambiando los vehículos en los que trabajamos, está cambiando el precio, los clientes… Estamos también viviendo cambios normativos muy importantes”.

Nuestras formaciones abarcan desde Atención al Cliente hasta pintores, chapistas, mecánicos…

Ante esta avalancha, la asociación decidió coger el toro por los cuernos, y empezar a ofrecer a sus socios formaciones propias que les permitieran hacer frente a esos constantes cambios. “Todos queremos tener un taller muy profesional, una atención al cliente muy correcta y buenas relaciones con compañías de seguros”, continúa Ricardo Borrajo, “por eso, nuestras formaciones abarcan desde Atención al Cliente hasta pintores, chapistas, mecánicos…”.

El presidente de Atave está muy contento con los buenos resultados que han dado estas formaciones, por las que han pasado “400 socios de la asociación, y hasta 90 desempleados para incorporarse al sector”, concluye Ricardo Borrajo, considerando que un punto fuerte en el mundo de los talleres es que “son trabajos muy estables”.

Cruzando el charco

Entre los alumnos que están ahora mismo preparándose para ser nuevos mecánicos se encuentra Luciano Ponte, que llegó desde Perú a Galicia para labrarse un futuro. “Es una motivación personal”, comenta Ponte, “aprendí un poco allá en Perú, y necesitaba complementar todo esto de mecánica aquí porque no tengo un documento oficial”.

El futuro mecánico viene a diario desde A Coruña para formarse después de que “allí me fuera imposible conseguir un curso como este”. Tras cuatro meses de formación, encuentra que “en las clases teóricas, el profesor nos ha explicado todo muy bien, y complementamos toda esa teoría con la práctica”. Destaca de su aprendizaje, sobre todo, que “tenemos equipos, coches que están actuales. La tecnología nos brinda esa oportunidad de aprender”. A diferencia de su país natal “hay algunos que son similares, pero también los hay diferentes. Es más, entre coche y coche, acá mismo, encuetras muchas diferencias”, concluye.