Ourense y otras localidades gallegas se movilizarán en solidaridad con Palestina

El próximo lunes 31 de marzo, Ourense se unirá a la convocatoria de manifestaciones organizada por la Coordinadora Galega con Palestina, junto con otras 33 localidades de Galicia, para denunciar la ofensiva del Ejército israelí en la Franja de Gaza. Bajo el lema "la ocupación, el bloqueo y el genocidio continúan", los convocantes exigen el fin de la violencia y de la situación que sufren los palestinos, recordando el alto al fuego roto el mes pasado, que resultó en la muerte de más de 500 personas en una sola noche.

En Ourense, la protesta comenzará a las 19:30 horas, sumándose así a las concentraciones programadas en las otras grandes ciudades gallegas, como Santiago de Compostela, A Coruña, Vigo y Lugo. A nivel regional, se movilizarán también localidades más pequeñas, como O Barco de Valdeorras, Monforte de Lemos, y Melide, entre otras.

Denuncias de los organizadores y la situación en Gaza

Durante las concentraciones, diversos representantes de asociaciones y colectivos, como Ánxela Gipinni de Galiza con Palestina y Sami Ashour de la Asociación Galaico Árabe, denunciarán el "horror" que viven las familias palestinas en Gaza, donde la escasez de agua potable, alimentos y asistencia médica ha agravado la crisis humanitaria.

"Hoy mismo atacaron los talleres de reparación de ambulancias", destacó Ashour, quien también criticó la falta de respuesta efectiva por parte de la comunidad internacional frente a lo que calificó como un genocidio.

El simbolismo del 31 de marzo y la movilización gallega

El 31 de marzo ha sido elegido por su carga simbólica, ya que coincide con el Día de la Tierra de Palestina, una fecha clave que conmemora la huelga general de 1976 en respuesta a un plan israelí de expropiación de tierras palestinas. Aunque esta fecha tiene un reconocimiento internacional, los convocantes recuerdan que no ha generado consecuencias legales para Israel.

Oposición a la "hipocresía internacional"

Óscar Valadares, portavoz de Mar de Lumes, expresó su condena a la "hipocresía internacional" y la "impunidad absoluta" con la que opera Israel, asegurando que si no fuera por el apoyo de Estados Unidos y la Unión Europea, no estarían presenciando lo que calificó como un genocidio. Por su parte, Gipinni denunció también la falta de acción de los gobiernos internacionales, tanto el español como el gallego, señalando que sus palabras no se traducen en medidas efectivas contra Israel.