Vandalizado el cartel de la zona termal de O Muíño tras la polémica aparición de Jácome

RESPUESTA CIUDADANA

El cartel de las termas do Muiño da Veiga aparece vandalizado tras la reapertura de la zona por Gonzalo Pérez Jácome, alcalde de Ourense, con el baño simbólico junto a su concelleira de Artes, Festejos, Saúde e Termalismo, Noa Rouco

El cartel de la polémica, vandalizado, este miércoles en un Muíño da Veiga repleto de bañistas.
El cartel de la polémica, vandalizado, este miércoles en un Muíño da Veiga repleto de bañistas.

El cartel informativo de las termas do Muíño da Veiga ha aparecido vandalizado este jueves, apenas unos días después de que el alcalde de Ourense, Gonzalo Pérez Jácome, protagonizara una polémica reapertura del espacio con un simbólico baño acompañado por su concelleira de Termalismo, Noa Rouco.

El letrero que advierte sobre la recomendación de no bañarse en las termas do Muíño da Veiga apareció este miércoles vandalizado, con el “non” tachado con pintura negra. La señal fue instalada por el propio Concello tras recibir la advertencia formal de la Xunta de Galicia sobre la falta de garantías sanitarias en estas aguas, actualmente sin declarar como termales ni sometidas al control exigido por la normativa vigente.

El baño más polémico del año

Estea intervención se produce días después de que el alcalde de Ourense, Gonzalo Pérez Jácome, protagonizara un simbólico baño junto a la concelleira de Termalismo, Noa Rouco, para celebrar la reapertura del recinto, cerrado durante meses por las crecidas del Miño. La escena, difundida en redes sociales, provocó críticas por su incoherencia institucional y por ignorar las recomendaciones sanitarias de la Xunta.

El acto fue difundido en redes por el propio Jácome, quien se comparó con Fraga en Palomares, a pesar de que la Xunta desaconseja el baño por falta de control sanitario. La presencia del logo del Concello en el cartel, que advierte del carácter lúdico del agua, contrasta con la escena del alcalde incumpliendo la recomendación.

Además, la imagen de la concelleira, en bañador y sin intervenir en el vídeo, ha generado críticas por su papel pasivo en un asunto de su competencia. La Xunta ha recordado la necesidad de cumplir con garantías sanitarias en estos espacios.

El acto ha sido tildado de incoherente y propagandístico, y la vandalización del cartel podría ser una respuesta al creciente malestar ciudadano.

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