Siete puntos de la N-525, entre los más peligrosos de España

La carretera N-525 (Benavente-Santiago) a su paso por la provincia de Ourense suma siete de los 270 tramos de carretera más peligrosos de España. Así se desprende de un estudio presentado ayer por la organización Automovilistas Europeos Asociados (AEA), tras analizar la peligrosidad de las vías españolas entre los años 2018 y 2022.

De acuerdo con las mediciones de la AEA, Ourense es la segunda provincia gallega con más tramos de carretera entre los más peligrosos del país, solo por detrás de Pontevedra. Todos estos tramos se sitúan en puntos kilométricos de la N-525 que van desde el término municipal de A Gudiña hasta el de Trasmiras, principalmente en la zona de subida y bajada conocida como “As Estivadas”, donde se acumulan fuertes pendientes. Tiene su núcleo en Verín y abarca Riós, Vilardevós, Monterrei y Albarellos. Son zonas que registran una intensidad media de circulación de alrededor de 833 vehículos diarios, y que durante los últimos cinco años registraron hasta doce accidentes donde hubo un fallecido o un herido leve o grave.

El punto kilométrico 171 (Monterrei), sería el más peligroso de todos, y ocuparía la posición 127 a nivel nacional

Teniendo en cuenta estos datos, la AEA ha elaborado un índice de peligrosidad media, donde el punto kilométrico 171, dentro del término municipal de Monterrei, sería el más peligroso de todos en Ourense, y ocuparía la posición 127 entre la clasificación realizada por la plataforma. El punto más peligroso de Galicia se sitúa en las proximidades del Alto de Fontefría, en el concello de A Cañiza, donde la N-120 se coloca en la posición 26 de la lista elaborada por la AEA.

Los tramos gallegos

Precisamente la provincia de Pontevedra es la que recoge más tramos con alta peligrosidad en este estudio, con un total de 9. La N-525 tiene aquí otro punto más de alto riesgo, dentro del concello de Dozón. La N-120 acumula otros cinco tramos peligrosos. A Coruña suma otros cuatro, repartidos entre la vía N-547 y N-6, y tan solo uno se sitúa en Lugo, concretamente a la altura de la localidad de Baamonde (Bergondo), en la N-6. Un total de 21 puntos y más de 2.000 kilómetros que colocan a Galicia en la sexta posición de las comunidades autónomas con más puntos peligrosos.

En el conjunto de España la plataforma observa una reducción del índice de peligrosidad del 2,4% los últimos cinco años.