WhatsApp rompe su promesa e incorpora anuncios en su plataforma

WhatsApp, la aplicación de mensajería con más de 2.000 millones de usuarios en el mundo, introduce por primera vez anuncios publicitarios en su plataforma. Meta, su empresa matriz, ha anunciado que los anuncios aparecerán exclusivamente en la pestaña de actualizaciones, concretamente en los estados y en los canales informativos, dos espacios que imitan el formato de redes sociales como Instagram.

Según Meta, las conversaciones privadas y las llamadas seguirán estando protegidas por cifrado de extremo a extremo, y no serán utilizadas para fines publicitarios. La segmentación se basará en datos generales como país, idioma o canales seguidos, pero no en mensajes personales. Aun así, la decisión ha reavivado el debate sobre la privacidad. Organizaciones como la Electronic Frontier Foundation (EFF) advierten que el rastreo de comportamiento, aunque indirecto, podría ser el inicio de un uso más intrusivo de los datos.

Esta no es la primera vez que Meta intenta monetizar WhatsApp. Ya en el 2018 se propuso introducir publicidad, pero el proyecto fue cancelado tras fuertes críticas. En 2021, un intento de compartir más datos con Facebook también generó una oleada de desconfianza y una migración significativa de usuarios a plataformas alternativas como Signal o Telegram.

En esta ocasión, Meta apuesta por un modelo que también incluye oportunidades para empresas y creadores: podrán pagar para promocionar sus canales y ofrecer contenidos exclusivos mediante suscripciones, sin que por ahora se cobre comisión por ello. Con esta estrategia, Meta pretende posicionar a WhatsApp como una plataforma más cercana a modelos como el de WeChat, donde la mensajería se combina con servicios comerciales.

La medida ha sido bien recibida por los mercados, pero genera preocupación entre usuarios y reguladores europeos. La tensión entre monetización y privacidad vuelve a estar sobre la mesa.