Inquietud por los ataques del lobo en Viana: “Es insostenible”

Insostenible. Así describe Javier Rodríguez Tamerón la situación que ocasionan los continuos ataques del lobo a su ganadería. Asentada en los montes vecinales en mano común la aldea de Pradorramisquedo, en Viana do Bolo, asegura que en los dos últimos años ha perdido medio centenar de cabezas. “Traballo para manter o lobo”, declara.

Javier cuenta con una explotación de vacuno en extensivo de 105 animales y, según afirma, la población de lobos es cada vez mayor en su territorio y no es extraño ver manadas enteras correteando por los montes.

Si hace apenas unos años avistar estos animales no era lo más común, “nestes dous últimos anos o número de lobos multiplicouse. Dende o gran incendio forestal da Serra da Culebra houbo unha migración cara a esta zona”, explica Javier. Y es que Pradorramisquedo se encuentra precisamente en la zona limítrofe con Zamora.

Según relata, los ataques comenzaron hacia los terneros y paulatinamente fueron aumentando en número. Con la finalidad de atajarlos, decidió encerrarlos, una medida que consiguió poner fin a los mismos. Sin embargo, ahora ha llegado el turno de las vacas. “Neste mes de xaneiro matoume tres vacas en 15 días”. Javier afirma que al aumentar en número las manadas, estas recurren a animales de mayor envergadura que no enfrentarían en solitario, de ahí que las vacas ahora se conviertan en su nueva presa.

Ayudas “insuficientes”

Si bien es cierto que existen ayudas por parte de la administración autonómica para mitigar las pérdidas, este ganadero afirma que “á parte de ser insuficientes, as bases das mesmas non contemplan a casuística específica de cada explotación”.

Así, explica que “para poder ser beneficiario é preciso que apareza o cadáver do animal e existan evidencias claras de que o seu falecemento foi producido polo lobo. Isto é moi complexo cando tes unha gandería en extensivo que se move en 1.000 hectáreas de terreo”.

Tanto es así que este ganadero vianés asegura que en los últimos dos años ha cobrado la indemnización de siete u ocho cabezas y ha perdido cerca de medio centenar.

Por ejemplificar esta situación, Javier afirma que, de las últimas tres vacas que ha perdido en su ganadería, solo recibirá la indemnización de una de ellas que ha resistido con vida al ataque y fue sacrificada posteriormente.

Los restos de las otras dos no han aparecido hasta el momento y confiesa que la indemnización que recibirá “é irrisoria”. “Era unha vaca de cinco anos que estaba na flor da vida e quedábanlle moitos anos por diante para dar beneficios.”

Una situación sin salida

Los ganaderos de esta zona afirman sentirse completamente desamparados y no visualizan una solución en un futuro próximo. Javier declara que lleva cinco años con la ganadería y en sus inicios convivió perfectamente con este animal y así lo quiere seguir haciendo pero afirma que “non quere traballar para mantelo”. Asegura que es defensor de la existencia de este animal, pero considera que es necesario llevar a cabo una gestión adecuada para que esta situación no acabe con el cese de las escasas explotaciones ganaderas que quedan en la zona.

La situación es semejante en el municipio de A Veiga, concretamente en la zona que limita con la provincia zamorana, donde los ganaderos también afirman haber recibido multitud de ataques en los últimos meses, tanto a vacas como a terneros. Una situación desesperante para muchas de ellos.

Desde la Consellería de Medio Ambiente e Cambio Climático afirman que “efectivamente hai liñas de axudas para paliar os danos e levar a cabo a prevención dos ataque do lobo” y recuerdan que estas “non son fotografías fixas se non que son ordes que se revisan ciclicamente e se melloran precisamente para avanzar nese sentido e adaptarse ás características e ás posibles novas necesidades que vaia xurdindo”. Añaden que, para llevar esto a cabo, “se utilizan como interlocutores ás asociacións representativas do sector xa que é inviable ir explotación a explotación polo que as demandas deben canalizarse a través das organizacións correspondentes para que estas cheguen á consellería”.