El chauvinismo es un concepto de origen francés que por eso se identifica siempre con lo francés. Según la Wikipedia el chauvinismo es "una creencia narcisista, próxima a la paranoia y a la mitomanía, de que lo propio del país al que uno pertenece es lo mejor en cualquier aspecto."
A mi el chauvinismo me parece netamente español. No soy mucho de ver deporte por la tele, pero me gustan los Juegos Olímpicos, especialmente el atletismo, la natación, los saltos y algunas otras disciplinas, así que este verano me he tragado, gratis y con gusto, unas cuantas horas de retransmisiones deportivas variadas. Muchas muy emocionantes.
Sinceramente: no sé de nada tan chauvinista como los comentaristas deportivos españoles. Ignoro si en otros países la cosa es igual, supongo que sí, pero aquí para los comentaristas televisivos de deportes nuestros atletas siempre tienen un mal día, o les perjudica la lesión que tenían antes de ayer, o el suelo está mojado, o se nubló, o el oponente tuvo suerte. Ni siquiera creo que los deportistas piensen esas cosas, ya que en realidad precisamente ellos son muy conscientes de que esas cosas les afectan exactamente por igual a ellos y a sus contrincantes.
Un ejemplo perfecto fue el partido de baloncesto España-Croacia, que por cierto perdimos. Si lo ven ustedes sin sonido se darán cuenta, algo que ya nos dice el marcador sin necesidad de haber estudiado una carrera mayor, de que ambos equipos fueron muy igualados todo el tiempo. Es más, el porcentaje de intentos de tiros de tres fallidos y/o acertados resulta bastante desolador para el equipo español y todo lo contrario para el croata. En cambio si lo ven con el sonido puesto y escuchan los comentarios de la retransmisión les parecerá que España merecía ganar todo el tiempo y al final tuvimos mala suerte. Me hubiera gustado ver y oir la retransmisión de la televisión croata pero bueno, tampoco me hace falta.
Pues yo a eso sí que lo llamo chauvinismo. Es como decir que no hay comida mejor en este mundo que la tortilla de patatas, el cocido o la paella. ¡Vaya! ¿Y qué pasa entonces con el sushi, la pasta, la comida china, la mejicana, los ceviches peruanos o el pavo del día de acción de gracias de los americanos? Yo he conocido a algunas personas que estando de vacaciones en Tokyo lo primero que hicieron fue ir al único restaurante español que había allí, para comer paella y bailar unas sevillanas. Algo parecido a comprarse un diccionario de rumano y estudiarlo a fondo para aprender portugués. Ya me dirán ustedes la paella que se puede comer en Tokyo. No quiero ni pensarlo. Y de bailar sevillanas ni les hablo. Bueno, como a los japoneses les encanta el flamenco y todo lo andaluz, eso sí, quizá ahí hubiera una oportunidad. No sé.
Chauvinismo: lo inventó un francés, Nicolás Chauvin, pero no es nada francés, es totalmente español.
Domo arigato.
