Opinión

Colores verdaderos

La paliza que ese chico rubio le dio la semana pasada a un chaval asiático en el metro de Barcelona mete miedo. Y también la actuación de su descerebrado amigo, que lo grabó con el móvil para subir después el vídeo a Youtube. Asombra este mundo en el que los delincuentes se graban a sí mismos para exhibirse después a nivel planetario y que todos, policía y jueces incluidos por cierto, seamos testigos de sus delitos. Claro que eso solo confirma lo rematadamente imbéciles que son. Como bien han apuntado tantos estos días, el Código Penal debería ser mucho más duro en esos casos.

Si no han visto ustedes el vídeo, ni lo vean. Da asco. El rubio, que supongo fan de Putin ya que es de origen ruso, se ensaña brutalmente con su víctima solo por ser asiático, propinándole unos puñetazos salvajes hasta que llegan a una estación, se abren las puertas y a patadas lo arroja al andén. La escena resulta además especialmente repulsiva porque el rubio es el típico cachotas y el agredido un muchacho delgadito a pesar de la diferencia de edad (el agresor es más joven que el agredido). Yo creo que el rubio tuvo suerte de que su víctima no fuera vietnamita, es mongol. Ya cantaban Carlos Puebla y los Tradicionales en los setenta en aquel tema, David y Goliath: "Los yanquis son grandullones, parecidos a gigantes, algunos como elefantes, pero no tienen... coorazones. Los vietnamitas son pequeñitos, son pequeñitos sí, pero con unos... coorazones así de grandes, así". Algo que pudieron comprobar en sus carnes los americanos en Vietnam.

Como cada vez nos toca asistir a más sucesos como este tal vez sería buena idea reinstaurar en nuestro continente una institución rusa ya olvidada, el Gulag, donde poder recluir a esa manada de inhumanos sin sentimientos. Nos resistimos a aceptarlo pero el racismo empieza a cabalgar por Europa, esta tierra habitada por avestruces, como un nuevo jinete del Apocalipsis; cada día más señales lo confirman. La parte buena del video es que muchas personas del vagón intervienen para intentar detener al agresor, lamentablemente sin éxito. Pero menos mal, ¡aun quedan bípedos no implumes en España! Bien por ellos.

Nuestros gobiernos deberían implementar, no sé si se dice así, una legislación antiracista en serio. Una que envíe a esos neonazis, abusadores, maltratadores, etcétera, a pudrirse por fin en un encierro eterno.

Otra idea que se me ocurre, esta disparatada es ¿y si los negros empezaran a atacar a los blancos, los asiáticos a los occidentales, los homos a los hetero, las mujeres a los hombres y los niños a los adultos? ¡Uau, esto me da para el guión de un buen thriller de terror psicológico!

Vale. Dejémoslo. Olvídense del vídeo y del rubio. Mejor piensen en el chico mongol y recuerden aquella canción de Cindy Lauper, True Colors, Colores Verdaderos: "Veo tus colores verdaderos brillando a través de ti. Veo tus colores verdaderos y por eso te quiero".

Te puede interesar